Guipúzcoa promete no invadir Inglaterra
Si alguna vez paseáis por Bidania, enfrente de las naves industriales tenéis el caserío Usarraga, en el paraje donde hace cuatro siglos y pico los guipuzcoanos decidieron no invadir Inglaterra.
Guipúzcoa se incorporó al reino de Castilla hacia el año 1200, pero mantuvo "una verdadera independencia en gravísimos asuntos internacionales durante los siglos XIII, XIV y XV", en palabras del historiador Echegaray. Así, en octubre de 1481, los representantes forales celebraron unas Juntas Extraordinarias en el paraje de Usarraga para establecer un trato con los ingleses: en caso de "guerra y represalias" entre los reinos de Inglaterra y Castilla, los guipuzcoanos permanecerían neutrales, como un estado independiente, ajenos a las trifulcas entre los otros dos. El 9 de marzo de 1482, con el visto bueno de los Reyes Católicos, Sebastián de Olazábal y sus consortes se plantaron en Londres para firmar con los ingleses el pacto que debía "permitir el libre comercio entre las dos partes y asegurar una buena y firme alianza, abstinencias de guerras, e inteligencias amistosas, tanto por tierra como mar y aguas dulces".
El pacto amistoso no incluye las vías aéreas, motivo por el que probablemente no he sido capaz de encontrar un vuelo barato en fechas adecuadas para escaparme unos días a Londres.
Publicado el 1 de febrero de 2010 a las 10:15.