John Landis. De John Belushi a Michael Jackson
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La carrera de John Landis es de lo más singular. Por un lado es uno de los directores americanos con más fama entre el gran público. Aunque muy pocos saben porqué. También es considerado uno de los genios del terror pero sólo hizo dos pelis de este género. Quizá la mayoría lo reconozcan por ser el que cambió para siempre el mundo de los vídeos musicales al dirigir en 1983 Thriller.
Después de un par de films de escasa trascendencia, John Landis dirige en 1978 Desmadre a la americana. Con esta peli revoluciona el cine de gamberradas universitarias, un género casi inexistente y relacionado con películas estúpidas. Hizo una comedia desternillante con momentos míticos e inolvidables. A pesar de sus pocas pretensiones el film se convirtió en un super éxito de taquilla y en una obra de culto que vista hoy no pierde ni una pizca de su gracia. Crearía escuela y luego vendrían un sin fin de imitaciones (por lo general de poca calidad) como las sagas de La revancha de los novatos y Porky's.
Con su siguiente peli no defraudó ni a la crítica ni al público. The Blues Brothers (ridículamente titulada en España como Granujas a todo ritmo) fue otro gran éxito que consagró a Landis como el director estrella de la nueva comedia americana. Sus excepcionales actuaciones musicales (James Bromw y Ray Charles entre otros) y sus alocadas persecuciones automovilísticas son parte de la historia del cine. John Belushi, el coprotagonista de ambas cintas y actor fetiche de Landis, se convirtió en uno de los actores más de moda de la época. Por desgracia no pudo disfrutar de este éxito durante mucho tiempo ya que moría de sobredosis un año después.
La meteórica carrera de Landis aun lo fue más cuando en 1981 dirige Lobo hombre americano en Londres, una joya del terror contemporáneo. Sus estupendos maquillajes y efectos especiales fueron totalmente innovadores, el momento de la transformación del protagonista en lobo dejó con la boca abierta a todo el mundo.
Después de estos rotundos éxitos Landis era el rey y tenía las puertas abiertas para hacer lo que quisiera. En el 83 hizo Entre pillos anda el juego, una comedia simpática pero sin más. Ese mismo año dirige Thriller, de Michael Jackson. Que decir sobre este vídeo clip tan de actualidad. Sólo que Landis tiene el 50% de los derechos de este vídeo. Hasta la muerte de Jackson estaban metidos en demandas porque el director no estaba cobrando sus derechos correspondientes.
En los siguientes 25 años su carrera se estancó alarmantemente. Sus comedias empezaron a no ser tan graciosas, pero mantenían cierto éxito comercial como lo demuestran Espías como nosotros, Tres amigos o El príncipe de Zamunda. Toca fondo con Oscar, una comedia imposible de gangsters al servicio de Sylvester Stallone que fue un fracaso de crítica y público absoluto.
Decidió volver al terror pero no le fue mejor. Sangre fresca es una aburrida película de vampiros que casi nadie vio. Su único acierto en todos estos años fue gracias a Michael Jackson. Lo volvió a elegir para dirigir su nuevo vídeo musical de 1991, Black or White.
Luego vendrían Superdetective en Hollywood 3, la peor de la saga. The Stupids, aquí si que toca fondo (creo que es de las peores pelis que he visto en mi vida) y Blues Brothers 2000 una de las peores segundas partes jamas rodadas.
Los últimos diez años se los pasó vagando por las televisiones sin hacer nada destacable sacando dos capítulos de Maestros del terror, aunque tampoco son gran cosa.
Ahora tiene tres proyectos anunciados, pero las esperanzas de que salga algo bueno de ahí son mínimas. ¿Qué te ha pasado John?
Publicado el 9 de julio de 2009 a las 09:00.