Balón dividido

Con este término no me estoy refiriendo a la película de Will Smith y Tommy Lee Jones, sino a los árbitros deportivos, una figura continuamente maltratada por la sociedad y por el deporte pero que además cuenta con la falta de apoyo de las personas que se encuentran por encima de ellos en los despachos.

Este tema viene por la constante polémica que se está convirtiendo en el centro de atención del mundial de fútbol de Sudáfrica, en el que los errores arbitrales son frecuentes en todos los partidos que hemos podido ver. Tal es el punto que el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, se vio obligado a pedir disculpas a las selecciones de México e Inglaterra (y por tanto a muchos aficionados volcados con su país), siendo una de las noticias que han copado las portadas de los medios internacionales.

Sin embargo, la propia Federación Internacional de Fútbol no sólo no facilita el trabajo a los árbitros sino que se lo pone más difícil. Para el presente torneo está terminantemente prohibido que se repitan en los videomarcadores las jugadas polémicas, y para colmo, los propios árbitros tienen prohibición de no mirar las repeticiones de los goles.

Bien es cierto que en los últimos años se están probando cosas para facilitar el trabajo de los jueces del partido, así han intentado usar dos árbitros en el campo, tres árbitros con asistentes, pinganillos y transmisores, jueces de gol, etc... pero la opción que aún no se contempla es la de utilizar los monitores para aclarar jugadas.

Este hecho es un tanto paradójico ya que en otros deportes como el fútbol americano la labor arbitral apenas tiene errores ya que pueden consultar las jugadas polémicas en los monitores y analizarlas desde diferentes ángulos, es más, los propios entrenadores pueden solicitar al árbitro la revisión de una jugada. Más recientemente el baloncesto ha implantado el "instant replay" para ver las jugadas de final de partido y decidir la validez y la puntuación de una canasta, al igual que ha hecho el tenis con el "ojo de halcón" usado por los propios tenistas para ver si la bola es válida o está fuera. O más atrás en el tiempo la "photo finish" utilizada en atletismo y ciclismo. Incluso hay organismos que basan sus sistemas de sanción tras analizar la situación en vídeo, como ocurre en la fórmula uno con la "comisión de vídeo".

Por ello, una de las cosas que nos debemos preguntar es ¿qué hay detrás de la FIFA para que se prohíba tan tajantemente utilizar el vídeo para analizar jugadas polémicas? Mientras tanto, los hombres de negro seguirán recibiendo la  carga de eliminaciones, polémicas y errores, solo espero que todos los aficionados tengan en cuenta que los árbitros son personas y como tales tienen derecho a equivocarse, y más cuando sus propios "jefes" no les ayudan.

Publicado el 2 de julio de 2010 a las 22:00.