Las vacaciones de Semana Santa
La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Educación, la ha vuelto a liar con las vacaciones de Semana Santa. Y es que, precisamente en una comunidad como Castilla y León donde la Pasión tiene una gran tradición unida a un gran atractivo turístico, el gobierno regional no favorece su lógico desarrollo. Lo mismo que ha pasado este año, en 2013 se vuelve a programar como vacaciones de Semana Santa la llamada ‘semana de Pascua’; es decir, la de después de la Semana Santa (del 28 de marzo Jueves Santo al domingo 7 de abril de 2013) cuando precisamente aquí no hay tradición como sí hay en otras comunidades del Lunes de Pascua. Con este calendario vacacional, ni se apuesta por la Semana Santa, ni por la conciliación familiar y laboral ni por la propia calidad de la enseñanza. Vamos, que no se favorece que los niños y jóvenes siga la tradición de formar parte de las procesiones que organizan sus cofradías porque al día siguiente hay clase; se ponen muchos obstáculos a muchos padres que durante una semana tienen problemas para compatibilizar su horario laboral y sus obligaciones de padres; y finalmente no se apuesta por la calidad de la enseñanza porque al final del Lunes Santo al Miércoles Santo son días lectivos ‘a medio gas’ por el ambiente vacacional que reina unido a que escolares de otras comunidades vienen a León de vacaciones. Al final se puede decir que prácticamente se pierden ocho días lectivos en Semana Santa mientras no se dan puentes como en La Inmaculada o el 1 de Mayo. Un derroche de días sin sentido
Publicado el 13 de abril de 2012 a las 10:00.
