La tijera de Rajoy
Mariano Rajoy pasará a la historia como el presidente del Gobierno español con más contestación social. Apenas llega a los seis meses en La Moncloa -sólo la octava parte de su mandato de cuatro años- y ya lleva una huelga general, tres manifestaciones dominicales y un sinfín de protestas sectoriales en la educación, la sanidad, la minería,... El malestar es general, sobre todo desde la ‘última ocurrencia’ de actuar en la sanidad y la educación rebajando 10.000 millones de euros en el gasto. Rajoy ha metido la tijera a tope y, lo que es más grave, de forma improvisada. Tomó unas medidas iniciales de subir el IRPF y el IBI, de subir las pensiones sólo el 1%, la reforma laboral, aprobó un plan para el pago de proveedores de ayuntamientos y autonomías y puso en marcha una política de austeridad y control del gasto público. Con la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2012 parecía que había tocado fondo en los ajustes y era el momento para empezar a plantearse crecer. Pero los mercados, otra vez los mercados y la especulación, obligaron a nuevas medidas de recorte; eso que cuando Zapatero lo hacía, Rajoy llamaba improvisación y ocurrencias. Y ‘metió mano’ en la educación y la sanidad y la sociedad ha dicho ‘hasta aquí hemos llegado’. Rajoy tiene este año y el que viene para hacer una gestión más austera en gasto corriente, a la vez que actuar sobre ese 25-30% de economía surmerdida. Así podrá lograr un dinero que le permitirá en los presupuestos de 2013 y 2014 hacer algunos ‘guiños’ sociales. De lo contrario...
Publicado el 25 de mayo de 2012 a las 11:00.