Será una de las batallitas que le contaré a mis nietos cuando sea abuelete, si llega ese momento. En todo caso, desde este mismo instante nunca dejaré de mencionar y recordar que he visto a los U2 en directo. Me enganché a su música con el piscodélico 'Achtung Baby' en plena adolescencia. Poco a poco, fui descubriendo sus discos anteriores, cuya escucha permite comprender la polivalencia estilística y rabiosa creatividad liberada por estos cuatro fenómenos. Tanto 'Pop' como 'Zooropa' aumentaron la leyenda, pero ésta no ha aumentado su tamaño a lo largo del siglo XXI. La gota que ha colmado el vaso ha sido 'No line on the horizon'. Aunque personalmente no me dice nada, uno tiene que marcharse a la tumba con la imagen y el sonido de esta gente en un contexto tan sobrenatural como el Camp Nou. El 30 de junio de 2009 quedará apuntado en mi agenda como uno de esos días en los que tu vida toma sentido. He cumplido un sueño. He visto a los U2.
'Zona 416. Fila 1. Localidad 18'. Ese es mi sitio. Ayer por la noche tuve una pesadilla horrorosa. Mi conexión a Internet no funcionaba. En el trabajo tampoco. Ningún locutorio, oficina ni local me echaba un cable para comprar mi sitio en el Camp Nou. Cuánto más grande es el sueño, más potente la frustración. Una vez despierto con el alba, intenté tomarme las cosas con calma pero, pese al cansancio provocado la pachanga de baloncesto, había dos letras en esta cabeza pervertida por las emociones fuertes. Soy un adicto a la adrenalina. Reconozcámoslo.
"Hagas lo que hagas a las 10 dejas de ser persona para convertirte en un robot que se dedica a machacar el teclado para ver a estos tíos", comentaba ante el espejo. Vete tú a saber. Se te fastidia la lavadora, algún accidente casero, tropiezas en las escaleras y te das un golpe morrocotudo, surge alguna tarea instantánea desde las altas instancias del 'curro'... Múltiples variantes podían tirar por los suelos el objetivo. Todo va bien. El reloj marca la hora esperada. Tensión. Varios intentos. Resultados inexistentes. Eufóricos afortunados dejaban comentarios en algunos foros, otros andaban mosqueados porque no había manera de lograr el tesoro. Algún día los responsables de Ticketmaster o cualquiera servidor de entradas para conciertos masivos deberían explicar cuáles son los motivos o las triquiñuelas informáticas que provocan la cara y no la cruz entre dos personas que se conectan al mismo tiempo. Además, tampoco estaría de más conocer el verdadero alcance de los gastos de emisión. Por ejemplo, si multiplicas 80.000 entradas por 8,50 euros.... Haz la cuenta. Ya verás.
Cuando la esperanza se acercaba al cubo de la basura... ¡Tachán! !Apareció la luz! Rebuscando entradas de forma aleatoria surgió una. 'Precio 3. Asiento reservado. Gradería 3'. Con esos dos minutitos que te dan para comprarla, mi pulso andaba dando tumbos. "¡Vamos, vamos!" 'Zona 416. Fila 1. Localidad 18'. Suspiro. Tranquilidad. Al no haber visto el escenario, por un momento creí que iba a estar de espaldas a la realidad. De eso nada. El hombre 'seguro' que ilustró el artículo 'Olivia, Labuat y Damien Rice' también ha confirmado su asistencia. Allí nos queremos, querido. Suenan vientos de 'Rodríguez'. Lo siento por los 'anti-U2', a partir de ahora pienso dar mucho el coñazo con estos tíos. ¡Qué vienen! ¡Qué vienen! Tsch, tsch...
30 de junio. Camp Nou. Barcelona. Este es el punto de partida de U2 para su nueva gira. Las primeras 18 citas de su '360º Tour' sólo incluyen una visita a España, la primera de su periplo oficial por el mapamundi. Nunca he tenido el gustazo de contemplar a Bono, The Edge, Adam Clayton y Larry Mulllen Jr. sobre un escenario. Por eso, al igual que he hecho con Michael Jackson, ya estoy pendiente de la famosa preventa de tickets para semejante acontecimiento en la Ciudad Condal. No, no estoy sobrado de pasta. Simplemente, tengo pocos vicios. La música es uno de ellos. Sano, ¿no?
Decepcionado por el 'innovador' (irónico epíteto) single 'Get on your boots', me dispuse a escuchar 'No line on the horizon' sin otra tarea que realizar, concentrando los cinco sentidos en esta misión. La primera escucha me agradó. Las posteriores provocaron cierta adicción en mis pabellones auditivos. Bien por encontrarnos ante sonidos demasiado habituales, bien porque el valor del pasado se cuela entre la apreciación del presente hasta el punto de distorsionar percepciones. Y es que uno se hizo hombre (literalmente hablando) cuando el 'Achtung Baby' inicia su delirio sonoro. 'Give once more chance and you´ll be sastified. Give two more chance and you won´t be denied...'
Es un disco llevadero, lo mínimo que se le puede pedir a una banda tan importante. Aceptable para escucharlo en casa mientras acometes las labores domésticas, cuando está trabajando en la oficina o en pleno atasco. Uséase, uno de tantos, sin capacidad para alcanzar ese grado superior que implica necesitar un poco del mismo para 'sobrevivir' al mundo real. Medios tiempos, algún ramalazo guitarrero, sobredosis vocales a cargo de Bono... ¿Han encontrado algún rasgo evolutivo sobresaliente? Por favor, háganmelo saber. Personalmente, mis piezas preferidas son 'Unknown caller' y 'Magnificient'...
Como dice Quico Alsedo en su blog de El Mundo, la producción es lo más destacable de un álbum común, una verdadera excusa para gozar con ellos en vivo. Un recorrido por la discografía de U2 es un viaje al más allá. Una explosión cardíaca. Un sobreesfuerzo criminal para los pulmones. La constatación perfecta de que la música activa espacios mentales que nada ni nada puede abrir. Ni con sacacorchos..
Publicado el 9 de marzo de 2009 a las 13:45.
Marcos Blanco
Vigués. Gallego. Periodista 'todoterreno'. Entusiasta de la vida. Melómano. Loco del deporte. Celtista. Enérgico. Radiofónico. Así es Marcos Blanco, periodista que actualmente colabora en el Grupo de Comunicación Gente con este blog, que nació un 19 de noviembre de 2008 con un 'post' sobre Jamie Cullum.
Esta web ha funcionado durante todo este tiempo como una banda sonora diaria, repleta de canciones que nos hacen amar la vida. Recuerdos, descubrimientos, opiniones, novedades, entrevistas o crónicas de conciertos han formado parte de 'Melómanos' y seguimos en la brecha: