Melómanos

Este martes 27 de noviembre era una fecha marcada en el calendario para muchos melómanos porque desde ya está disponible en el mundo entero ‘Girl on fire', el quinto disco de estudio de Alicia Keys. La cantante, pianista y compositora neoyorquina de 31 años había creado una gran expectación y, después de una primera escucha bastante sosegada, pongo la mano en el corazón para considerar que ha cumplido con creces.

Aunque siga teniendo ciertos arrebatos onomatopéyicos (un ejemplo sería la canción que da nombre al disco con Nicki Minaj) que se alejan de su identidad (querida, no intentes por favor emular a Beyonce en estas cuestiones ni tampoco supeditando las coreográficas a la música de algunos directos), ‘Girl on fire' es un disco estupendo porque mantiene la esencia artística que la hace inconfundible (ese piano del que brotan mil sentimientos en cada nota) y añade para la mezcla atrevimientos contemporáneos en las bases. Así, pinta un universo rítmico donde la música negra se puede apreciar en sus múltiples expresiones.

Como suele suceder con los álbumes de Alicia Keys, la ubicación geográfica y temporal del oyente va desapareciendo conforme avanzan las canciones de ‘Girl on fire', un nuevo incendio espiritual de una de las grandes del siglo XXI.     

Publicado el 27 de noviembre de 2012 a las 20:30.