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Mientras Mercedes Milá, defiende este miércoles en su blog Lo que me sale del bolo a su compañera de Telecinco, haciendo referencia a las declaraciones de Urbaneja sobre Sara Carbonero:
Lo que no me entra en la cabeza es que, como dice mi compañera Ana Rosa Quintana, el machismo puro y duro saque las cosas de quicio y tengamos que leer auténticas sandeces como las que se han dicho desde que os fuisteis a Sudáfrica. "La presencia de Sara Carbonero junto a la portería de Casillas, le distrajo, le desconcentró, fue una vergüenza".
Que yo recuerde nunca antes se habían hecho comentarios como éste. Nunca antes un periodista serio y honrado como Fernando González Urbaneja había perdido, desde mi punto de vista, la razón al considerar que tu presencia en los campos del mundial haciendo tu trabajo era: "una malversación del periodismo en una televisión". Muy grave me parece a mí semejante acusación; tan grave que exigiría al Presidente de la Asociación de la prensa de Madrid que se explicara y, llegado el caso, se excusara.
Y mientras la cadena aclara que la presentadora se coloca en cada campo donde exige la FIFA:
Telecinco informa de que "la ubicación de los periodistas sobre el césped está asignada por la FIFA, quien decidió que los reporteros acreditados por las cadenas que poseen los derechos del Mundial "se situaran detrás de las porterías de sus respectivas selecciones nacionales, pese a que Telecinco intentó sin éxito que Sara Carbonero pudiera ubicarse próxima al banquillo, donde se producen mayores oportunidades informativas.
Nos llega esta mañana un nuevo comunicado de la Asociación de la Prensa de Madrid que, bajo el título '¿A quién estorban las opiniones libres de González Urbaneja?', habla del "linchamiento moral contra su presidente, Fernando González Urbaneja, cuya trayectoria profesional se cuestiona y en la que se mezclan ataques personales con acusaciones extemporáneas, como la de machista".
La APM "rechaza por intolerable, improcedente y totalmente fuera de lugar la acusación de machista.
Consideramos que tal acusación sólo puede proceder de la ignorancia, ya que oculta, con torticera intención, que González Urbaneja ha puesto como uno de los objetivos principales de su mandato la defensa de la equiparación salarial entre mujeres y hombres periodistas, el acceso de la mujer a los puestos directivos de los medios y la conciliación de la vida familiar y laboral en nuestra profesión.
También se pretende obviar que González Urbaneja, cuando era presidente de la APM y de la FAPE, impulsó la exigencia a los medios para que retiraran los anuncios de prostitución por atentar contra la dignidad de la mujer".
Y yo me pregunto, ¿hasta dónde llegará el culebrón Sara Carbonero?.
Publicado el 30 de junio de 2010 a las 14:45.
