Gago y Van Nistelrooy, dos jugadores con destino a la Premier
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Llegaron a Madrid prácticamente en la misma temporada. Ruud Van Nistelrooy fue uno de los fichajes estrella en la llegada de Ramón Calderón. El holandés hacía goles a pares, o de cuatro en cuatro como aquella noche en el Reyno de Navarra; pero el equipo no carburaba y el Madrid buscó soluciones en el mercado de invierno. Así llegaron Gago e Higuaín, el primero con la vitola de estrella y el segundo poco menos que de relleno. Cosas del fútbol, ahora Higuaín es casi intocable y Gago podría hacer las maletas con destino al Manchester City, sobre todo tras la vuelta de la Copa de África de Diarrá. El maiiense, Granero, Lass, Xabi Alonso...demasiada competencia y todos cuentan con más confianza del entrenador que Gago.
Es cierto que el Bernabéu la tiene tomada con el argentino. Sus últimos partidos en el campo madridista deben haber sido un calvario para él. Cuando estás en ese césped y oyes el 'run run' de 80.000 personas debe caer sobre tí una presión tal que las piernas se te agarroten y los pases se te desvíen unos cuantos metros.
Siempre he creído que Gago no tiene la culpa de nada. Él juega como le han enseñado en Argentina (el prototipo de mediocentro allí se asemeja más a Mascherano que a Xavi), los pases largos no es algo común en el fútbol sudamericano porque el ritmo es lento y la mayoría de los jugadores la quieren al pie, nunca al espacio. Gago nunca se ha escondido cuando se pone la camiseta blanca y da todo lo que tiene dentro, si eso es mucho o poco, queda a la opinión del público, pero no se le debe exigir más de lo que puede dar.
Distinto es el caso de Van Nistelrooy. Creía que era un jugador que fuera del estilo de juego de la Premier nunca triunfaría. He de comerme mis palabras. Su primer año fue sublime y no ganó la 'Bota de Oro' por culpa de las lesiones. Después, ha conocido más la enfermería que el terreno de juego, pero siempre ha sido una garantía de rendimiento y de profesionalidad. Nunca dice una palabra más alta que la otra, pero tengo la sensación que sus decisiones pensando en la selección y la etiqueta de 'fichaje de Calderón' al final han pesado mucho en la directiva que le busca acomodo. Si al final se van, suerte a los dos.
Publicado el 21 de enero de 2010 a las 19:00.
