Los martes al sol o la vida futbolística sin Champions League
Archivado en: Real Madrid, Liga de Campeones
La llegada del mes de abril es sinónimo de muchas cosas. Cambio horario, más horas de día, el sol empieza nos hace olvidarnos del largo invierno y la Champions llega a su fase más espléndida: eliminatorias a ida y vuelta entre los mejores equipos del continente, es decir, la Copa de Europa en estado puro. Mientras los primeros factores siguen más o menos constantes (dependiendo del manido cambio climático), los madridistas nos hemos acostumbrado a ver el torneo de los torneos con más pena que gloria.
Mientras Iker Jiménez trata de averiguar si existen o no fantasmas en el Bernabéu que se aparecen en los octavos de final, este martes Barça e Inter de Milán comienzan a dirimir quién estará en el Bernabéu el 22 de mayo. Azulgranas y neroazzurri concentran toda la atención y los jugadores madridistas sólo pueden entrenarse en Valdebebas para después salir en rueda de prensa diciendo tópicos del orden de "habrá Liga hasta el final", o "no tiramos la toalla".
Todas estas líneas, llenas de mala leche, vienen a decir una cosa: yo también quiero que el Madrid gane la Liga, pero los árboles no deben impedir que veamos todo el bosque. Se han hecho cosas mal y desde el club se deberían empezar a tomar medidas para la temporada que viene. Por historia y presupuesto, este club no puede vivir otro curso sin llegar al mes de mayo vivo en la Copa de Europa, 'su' competición.
Publicado el 20 de abril de 2010 a las 11:00.
