Esperando la llegada de Jose Mourinho al Santiago Bernabéu
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Cuando Howard Webb decretó el final del partido entre el Inter y el Bayern, Florentino Pérez debía ser un hombre feliz. Finalmente, ni Robben ni Sneijder decidieron la final, su foto no iba a ser la portada del día siguiente en los medios, una imagen que pondría en entredicho otra vez la venta de los internacionales holandeses. Sobre el césped, los flashes buscaban a Mourinho. Florentino tenía la certeza de haber acertado con su contratación.
Durante los últimos días, los mensajes del técnico portugués dejaban a las claras que vendría al Madrid. El gesto definitivo fue no ir al Giuseppe Meazza con los jugadores. Ahora sólo queda saber cuándo y cómo se anunciará su fichaje, aunque algunos como 'Marca' se permiten la licencia de decir que ya es entrenador del Real Madrid.
Por primera vez, Florentino no inicia la casa por el tejado y contrata al entrenador antes de dar rienda suelta a su tradicional búsqueda de 'galácticos'. Da la sensación que el fichaje estrella va a ser Mourinho. La llegada del luso es un arma de doble filo: si el Madrid carbura todo irá sobre ruedas, pero si el equipo no funciona las miradas ya no irán al banquillo, ni siquiera a Valdano, sino a Florentino. La última vez que el presidente se vio en tal tesitura tomó la puerta de salida, ¿se repetirá la historia?
Publicado el 24 de mayo de 2010 a las 15:15.
