Khedira, Carvalho, Iniesta, Milito...las bajas, protagonistas
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Las numerosas etapas de montaña que están teniendo que afrontar Real Madrid y Barça en los últimos días parecen estar pasando factura. Todavía quedan varios puertos para acabar la etapa reina, pero el ritmo del pelotón empieza a dejar damnificados por el camino. Unos, como Iniesta o Carvalho volverán a estar con el grupo principal, mientras que otros como Khedira lo tienen complicado para volver antes de que termine la temporada.
Con unos partes de bajas tan completos, la pregunta que debe formularse es quién sale más perjudicado ante estas ausencias. El clima de victimismo que se ha instalado en el Barça hace pensar que Guardiola sale perdiendo ante tantas bajas, pero como casi todo en esta vida lo importante es la calidad, no la cantidad.
Es decir, a pesar de la importancia de Iniesta en el juego de toque azulgrana, no creo que Pep tuviera en mente una defensa muy distinta a la de esta noche. Maxwell no parece un lateral de garantías para partidos de este calado y Mascherano se ganó en la final de Copa una nueva oportunidad para repetir como central, con Puyol actuando de lateral izquierdo, una baza para tapar contragolpes y un seguro a la hora de poder cerrar esos centros laterales que tanto peligro llevaron en la final de Mestalla: uno acabó en el gol de Ronaldo y el otro estuvo a punto (remate de Pepe al palo).
La entrada de Keita hace que el Barça pierda juego de toque en el centro del campo, pero a cambio garantiza ayudas defensivas y un respiro para jugadores como Pedro o Villa que ya no estarán tan obligados a hacer esfuerzos de ida y vuelta con los laterales blancos. Con esto, el problema radica en el banquillo, ya que un contratiempo en forma de lesiones o tarjetas dejaría a Guardiola casi sin respuestas.
Los problemas parecen mayores para Mourinho. A pesar de sus mensajes en rueda de prensa, Pepe no es el líder de la zaga. Quien manda, ordena y decide en qué punto se tira la línea es Ricardo Carvalho, alma mater de Mou sobre el césped. Sin él, las opciones son Albiol o Garay, siendo este último el que parte con más posibilidades a tenor de lo visto en el partido de Liga en Mestalla. Albiol jugó como lateral, el argentino, en su puesto natural.
Si a esto le unimos que Khedira tuvo un papel importantísimo en la final copera a la hora de tejer la tela de araña en el centro del campo, anulando a Iniesta en muchas fases del partido, a Mourinho se le plantea la disyuntiva de apostar por Granero o Lass. Con el canterano, el portugués podría jugar la baza de la sorpresa. Poner otro 'jugón' al lado de Xabi Alonso revirtiría los roles de Madrid y Barça. En cambio, la lógica dicta que apueste por Lass para intentar asfixiar a Xavi.
Pero como en cualquier noche grande de Champions, será un partido de nombres, no de ausencias. La guerra dialéctica entre Mourinho y Guardiola refleja la importancia de la eliminatoria. Todo está preparado. Hagan sus apuestas.
Publicado el 27 de abril de 2011 a las 11:15.