Primeros pasos del futuro gobierno
El próximo 21 de diciembre, Mariano Rajoy tomará posesión como presidente del Gobierno, y comenzará a anunciar sus primeras decisiones, los nombres de los ministros y las medidas más prioritarias. El tiempo transcurrido desde el 20-N no ha pasado en balde. Sin hacer mucho ruido, Rajoy ya ha dejado suficientes pistas de cuáles son sus prioridades para devolver la confianza a los mercados y afrontar la crisis y de cómo ha estado trabajando desde el día siguiente a las elecciones para aprovechar los largos plazos de la transición. Su política mas inmediata pivotará sobre tres ejes, reforma financiera, reforma del mercado laboral y reducción del déficit público. Mucho antes de tomar posesión y sin que se haya filtrado un solo nombre de los que se sentaran en su Gobierno, Rajoy ya ha iniciado las conversaciones con los responsables de la patronal y de los sindicatos para transmitirles la necesidad de aprobar cuanto antes el nuevo marco de relaciones laborales. Dada la urgente necesidad de flexibilizar el mercado de trabajo, ha instado a los agentes sociales a que se pongan de acuerdo sin demora. El escenario más oportuno sería que se cerrara un acuerdo de consenso, pero si no fuera posible, se recurrirá a la vía del Decreto Ley antes que eternizar las negociaciones. Con cinco millones de parados y con unas previsiones tan desalentadoras como las que vaticinó la OCDE, que eleva la previsión de desempleo al 23 por ciento, urge acabar con la maraña de contratos y apostar, como reclaman los empresarios, que son los que más saben de las dificultades para crear nuevos puestos de trabajo, por un contrato fijo y único y menor rigidez en horarios y convenios. Al mismo tiempo, Rajoy ha dejado bien claro, dentro y fuera, que España cumplirá el objetivo de déficit por encima de todo sin la menor duda y para ello ha convocado a los presidentes autonómicos para dar una vuelta de tuerca y hacerles partícipes de la necesidad de ser escrupulosos en la contención del gasto.Hay algunos indicativos de que las autonomías empiezan a ser conscientes de la extrema situación y el dato del tercer trimestre del año ha situado el déficit en el 1,19%, por debajo del objetivo del 1,3%.Sin echar las campanas al vuelo, parece que comienzan a verse los frutos de los recortes puestos en marcha tras las elecciones autonómicas. Sobre el tercer eje, la reforma financiera, ya mantuvo un encuentro con los banqueros para escuchar sus posiciones y exponerles las suyas. Sin prisa pero sin pausa, Rajoy va despejando las dudas que su mutismo ha provocado.
Publicado el 1 de diciembre de 2011 a las 15:45.
