Tiempo muerto

El pasado domingo, Alberto Contador se subía a lo alto del podio en las Campos Elíseos de París como ganador del Tour Francia. De este modo, el ciclista español consigue su tercer triunfo en la ronda gala y con 27 años tiene un portensoso futuro por delante después de haber logrado las mencionadas victorias en Francia, un Giro de Italia en 2008 y la Vuelta a España en 2007.

Contador abandera la dictatura española en la vuelta más prestigiosa por etapas que se disputa en el mundo del ciclismo. A las tres victorias del pinteño hay que sumar los triunfos de Carlos Sastre y Óscar Pereiro durante el último lustro para completar un pleno extraordinario.

Ahora mismo, el líder de Astana se postula como el sucesor de Miguel Indurain si tenemos en cuenta los éxitos obtenidos durante su trayectoria profesional. El navarro se vistió de amarillo cinco veces seguidas en París (del 91 al 95), su estilo era muy diferente y también el contexto deportivo que atravesó durante su etapa como profesional. Sin embargo, Indurain ganó su primer Tour con 27 años (Contador tenía 24) y los dos Giros con 28 y 29 años, respectivamente. Contador lleva una carrera tan veloz hacia el estrellato que podría pulverizar los registros de Miguel en cuanto a grandes vueltas. Además, ha sido ciclista español que ha conseguido Tour, Giro y Vuelta.

Después de la fiesta celebrada en París, Contador ha vuelto a España donde le esperaban sus vecinos de Pinto con los brazos abiertos. La localidad madrileña, situada en las cercanías de la capital, le dedicó mil aplausos y otros tantos cánticos a su vecino cuando éste apareció por el balcón del Ayuntamiento. "Luego, la gente me pregunta que si sigo viviendo en Pinto. ¿Cómo no voy a vivir aquí con el cariño que me dáis?, bromeaba Contador. Debido al cansancio acumulado, el corredor del Astana no participará en la Vuelta a España y tiene previsto disputar dos vueltas grandes en 2001. Una será el Tour. ¿La otra? Ya veremos.

Marcos Blanco

marcos@gentedigital.es

Publicado el 27 de julio de 2010 a las 12:30.

Estas eran las declaraciones de Alberto Contador al término de la etapa que finalizó en Pau el pasado martes. El ciclista español llega a la segunda jornada de descanso en la ronda gala como líder de la carrera, le saca 8 segundos a Andy Schleck y sólo dos obstáculos le separan de la gloria parisina: la temida etapa con final en el Tourmalet (jueves) y la contrarreloj de 52 kilómetros entre Burdeos y Pauillac (sábado).

El corredor del Astana sabe que Shleck tiene que atacar en la decimoséptima etapa del Tour para quitarle el maillot amarillo. Dos puertos de categoría y uno especial, el famoso Tourmalet, otorgan una máxima dificultad a los 174 kilómetros de esta jornada ciclista. Sin lugar a dudas, "es una etapa muy dura en donde las diferencias pueden ser muy grandes. Andy Schleck pondrá todo de su parte para ganar y es un problema porque es un grandísimo corredor", ha señalado el pinteño.

Posteriormente, el líder del Astana también deberá mostrar su mejor en la contrarreloj del sábado, aunque manifiesta un mayor optimismo en este sentido que cuando habla del Tourmalet. "La contrarreloj me viene mejor a mi, pero habrá que tener en cuenta a Andy, ya que viene de proclamarse campeón de Luxemburgo en esta modalidad", ha explicado Contador sobre esta etapa. Las fuerzas de ambos y el viento pueden ser factores decisivos en el resultado final. 

El ciclista español de 27 años ha hecho las paces con Shleck después del incidente sucedido el pasado lunes, cuando Contador aprovechó un problema técnico del luxemburgués para colocarse primero en la general. Ahora, tiene entre ceja y ceja la consecución de su tercer triunfo en el Tour de Francia, toda una gesta en la trayectoria deportiva del pinteño. La respuesta, el próximo domingo.

Marcos Blanco

marcos@gentedigital.es

Publicado el 21 de julio de 2010 a las 11:45.

Alberto Contador se ha vestido el maillot amarillo tras la decimoquinta etapa del Tour de Francia, arrebatándole la posición a Andy Schleck. El luxemburgués tenía 31 segundos de ventaja sobre el pinteño, pero un problema técnico del corredor del Radioshack fue aprovechado por el líder del Astana durante la ascensión al Port de Balés.

Cuando ambos estaban subiendo, siguiéndose muy de cerca, Schleck tuvo un problema con la cadena de su bicicleta que le hizo parar. Contador aprovechó la situación y tiró para sacarle ventaja en los kilómetros que restaban hastas el término de la etapa. De este modo, se ha colocado primero en la ronda gala con ocho segundos de ventaja sobre Schleck. La situación ha generado una gran polémica en torno al 'fair play'.

Andy se ha enfado, ciclistas como Lance Amstrong han considerado que Contador se ha equivocado y hasta el propio Alberto se ha manifestado en este sentido a través de este vídeo. "Tal vez me he equivocado, lo siento", ha dicho Contador. Juzguen ustedes mismos. ¿Ha hecho lo adecuado?

Marcos Blanco

marcos@gentedigital.es

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-Crónica de la etapa

Publicado el 20 de julio de 2010 a las 09:30.

Este sábado echa a rodar la ronda ciclista por antonomasia, el Tour de Francia. La vuelta ciclista gala ha cobrado un acento español en las últimas ediciones. Desde que Lance Armstrong completó su colección en 2005, Pereiro, Contador, Carlos Sastre y de nuevo Contador han escuchado el himno español en el podio de los Campos Eliseos.

Por eso, todas las miradas estarán puestas fundamentalmente en un hombre: Alberto Contador. Este pinteño de 27 años se ha acostumbrado a convivir con la presión. En 2008 llegó al Giro de Italia de rebote y a pesar de no estar en su mejor momento de forma de la temporada acabó vestido de rosa. Más difícil fue lograr el Tour de 2009.

Contador tuvo que hacer frente a los rivales, a las cimas míticas de la ronda francesa y a un contrario inesperado: su propio equipo. Cuando comenzaron la pretemporada todos salían a rodar con el maillot del Astaná, todos menos uno, Lance Armstrong. Era un síntoma de que el norteamericano tendría mucho peso en el equipo de Bruyneel. Con el prestigio que da ser una leyenda viva de este deporte, Bruyneel no dudó en apostar todo a una sola carta, la del heptacampeón del Tour. La marginación de Contador llegó hasta tal punto que el madrileño se tuvo que comprar unas ruedas él mismo para una contrarreloj. Pero el ciclismo no entiende de favoritismos y la carretera acaba poniendo a cada uno en su lugar. Contador ganó su segundo Tour y Armstrong tuvo que mirar desde el tercer escalón del podio el logro de su compañero.

Este año, cada uno va por su cuenta. Lejos de formalismos, Bruyneel y Armstrong conformaron un equipo, el Radio Shack, que cuenta con varios de los mejores ciclistas del pelotón internacional. Klöden, Leipheimer, Sergio Paulinho, Brajkovic... a priori, el norteamericano cuenta con unos gregarios de lujo para despedirse a lo grande de la vuelta que más alegrías y reconocimiento le ha dado.

Pero sería injusto reducir este Tour a un pulso entre Armstrong y Contador. Andy Schleck también aparece en la nómina de favoritos. Para ello, el luxemburgués llega rodeado de un fenomenal equipo en el que destacan su hermano Franck, Jens Voigt, O'Grady y Cancellara.

En un segundo plano queda el campeón de 2008, Carlos Sastre. El corredor del Cervelo Team llega con algunas dudas tras disputar el Giro de Italia pero con ganas de quitarse el mal sabor de boca del año pasado. La experiencia que le da llevar tantos años en la alta competición y esa madurez que le evitará hacer esfuerzos inútiles le colocan siempre como un ciclista a tener en cuenta.

En total serán 3.600 kilómetros de dureza y espectáculo. La octava etapa, correspondiente al domingo 11, ya incluye cinco puertos, dos de ellos de primera categoría. Diez días después, la jornada no termina en alto, pero antes el pelotón deberá haber subido el Col d'Aspin, el Aubisque y el Tourmalet. Casi nada. El coloso de este Tour volverá a dictar sentencia el día siguiente.

Llega el momento de disfrutar con un deporte a medio camino entre la competitividad y la épica.

Publicado el 2 de julio de 2010 a las 06:15.

A sus 34 años, el cántabro de Torrelavega se impuso el pasado fin de semana en la clásica Milán-San Remo. Consiguió así su tercer triunfo en esta prueba, los mismos títulos que ha logrado en los Mundiales de Ciclismo en Ruta. Sin embargo, no se lleva todas las portadas que merece. Quizá el hecho de no ser un corredor de grandes vueltas o su condición de especialista al sprint y de competiciones 'todoterreno' con un solo día de duración sean factores que resten trascendencia al currículum de este ciclista, que viste el maillot del Rabobank.

Como dice Carlos Arribas en El País, lo de Freire se ha convertido en una sorpresa permanente. Alberto Contador se ha ganado a pulso la condición de mejor ciclista del momento por sus últimas hazañas en las vueltas de tres semanas. La nueva exhibición de este otro español, Óscar Freire Gómez, pide a gritos un pequeño pedazo del pastel para el cántabro y ratifica al ciclismo nacional en lo más alto del pelotón internacional.

Publicado el 23 de marzo de 2010 a las 20:30.