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Gente en Castilla y León

Mentiras y engaños

Choperas y los odiosos 8

Esta semana hemos visto agarrados al "palo del chopo" a la enésima promoción política (no entraba uno más) vendiéndonos la moto de los beneficios de tener choperas, y sobre todo alardeando de ser la provincia en la que más chopos se plantan en el terruño nacional. Nada más y nada menos que el 22%.

Archivado en: Nicolás Pérez Hidalgo, despoblación, choperas, chopo, promoción del chopo, el grupo de los 8, despoblación

Nicolás Pérez Hidalgo
19/2/2016 - 02:20

Y casi al mismo tiempo los odiosos ocho se juntan para pedir que Europa siga soltando dinero de sus múltiples ubres para frenar lo que ellos denominan despoblación, aunque mejor llamarla "echación" (refiriéndonos aquí al acto de echar a la gente de sus territorios con diferentes propósitos). Esas ocho comunidades (aunque no sé qué pinta La Rioja entre ellas) dicen ser las más despobladas de España y por eso se van a juntar como grupito de presión para llorar... y mamar.

Podrían juntarse también para analizar por qué se plantan chopos en las zonas más ricas y con mejores pastos de nuestra provincia y ver quiénes se benefician de ello y dónde residen (aunque solo hay que ver las fotos y leer los periódicos).

Casi al mismo tiempo, una tesis doctoral analizaba la evolución de los pinares en las montañas leonesas y podía verse como habían aumentado en el siglo XX los cultivos de pino, sobre todo en la media montaña. A la vista de ambas cosas la pregunta cae de suya... ¿Los chopos y los pinos son la consecuencia de la despoblación o la despoblación es el motivo por el que se subvencionan las plantaciones de pinos y chopos? Porque por la misma también podrían subvencionarse más y mejor la existencia de ovejas y cabras... Pero claro, eso es de otro sector... y aquí hablamos de beneficios pal sector Forestal.

Y mientras ponemos pinos y chopos en tierras antaño dedicadas a engordar las cabañas ganaderas o a diferentes cultivos, llevamos también años metiendo millonadas de los impuestos en llevar agua a los secarrales más grandes de la provincia para hacer cultivos de regadío, por no hablar de los daños socioculturales ocasionados con tanto pantano grande y pequeño en algunas de nuestras comarcas.

¡El mundo al revés!, pero como decía un paisano de mi pueblo: "donde den de comer... hacer y deshacer". Y como en la película de Tarantino, al final no quedará ni el apuntador.

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