Torrent alerta del peligro de combinar "odio e indiferencia" y pide no olvidar nunca el Holocausto
El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha alertado del peligro de combinar "el odio y la indiferencia", ha pedido que no se olvide nunca lo ocurrido en el Holocauso y considera que es una obligación transmitirlo a las próximas generaciones para que no se vuelva a repetir nunca más.
26/1/2021 - 19:18
BARCELONA, 26 (EUROPA PRESS)
El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha alertado del peligro de combinar "el odio y la indiferencia", ha pedido que no se olvide nunca lo ocurrido en el Holocauso y considera que es una obligación transmitirlo a las próximas generaciones para que no se vuelva a repetir nunca más.
Lo ha dicho este martes en el acto de conmemoración por el Día Internacional en memoria de las víctimas del Holocausto, que cada 27 de enero desde hace 15 años recuerda la liberación en 1945 del campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau, donde se han encendido seis velas por cada uno de los colectivos perseguidos y exterminados por el nazismo.
"El olvido nos hace culpables", ha apuntado Torrent citando a la escritora Montserrat Roig, y ha dicho que es importante que se defienda en todas partes el compromiso con la defensa de los derechos fundamentales, pese a la pervivencia de discursos de odio en Europa y también en Catalunya, que no es inmune, según él.
El acto, conducido por el periodista Ramon Pellicer y que ha contado con la presencia de miembros de todos los grupos políticos, ha comenzado con la lectura dramatizada de un fragmento del libro 'Ninguno de nosotros volverá', de Charlotte Delbo, y la interpretación de una pieza de la poeta checa y origen judío Ilse Weber.
Las seis velas se encienden en memoria de los judíos exterminados por los nazis, los niños que perdieron la vida en cámaras de gas, por las víctimas españolas asesinadas en campos de concentración y otros colectivos perseguidos, por los Justos entre las Naciones y por los supervivientes al Holocauso.
Torrent ha dado fuego a cada una de las personas que han encendido las seis velas, y tras el encendido se ha hecho un minuto de silencio con música, con la oración judía 'Kaddish' ('Santificado').