La fuenlabreña Carolina Espadas cambiará el camión de bomberos por el volante de un Suzuki Swift para competir desde este viernes 16 en la copa homónima y en el nacional de rally. Acostumbrada a romper esquemas, confía en hacer un buen papel en una competición muy complicada.
Marcos Baile
16/3/2018 - 10:35
Carolina Espadas es una mujer acostumbrada a romper esquemas. Fue la segunda en entrar al cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid. Ahora, la fuenlabreña apuesta por el rally. Tras correr en el de A Coruña la pasada semana, acompañada de su copiloto Fátima Macías y con Vanesa Rodríguez en la asistencia, se embarca en la Copa Suzuki y en el Campeonato de España de Asfalto (CERA) que arranca este viernes 16.
¿Cómo nace la idea de participar en rally?
Me gusta el mundo del motor. Con Oposur Bomberos patrocinamos muchos deportes y siguiendo a Carlos Bravo que corría en rally de tierra empecé a ver que me gustaba. Al igual que en su día decidí prepararme para bombera, aquí quise probar.
El de A Coruña ha sido tu primera toma de contacto, ¿qué tal las sensaciones sobre el asfalto?
Éramos 111 coches y salimos las últimas. No sabíamos lo que nos íbamos a encontrar, era un poco a ver qué pasaba. Cuando hice el primer tramo y el coche se me fue un poco vi que no era fácil.
¿Y con el coche?
Tenía pocas horas acumuladas. Es un Suzuki Swift Sport N3 que compramos en noviembre y había que hacerle arreglos. En A Coruña mi objetivo era terminar el rally y así fue. Además, no acabamos las últimas. Era una prueba muy complicada.
Este fin de semana arranca la Copa en Do Cocido, ¿cómo la ves?
Es un rally complicado y voy a intentar hacerlo lo mejor que pueda. La Copa Suzuki es de las que más ayuda. Somos 14 coches, por lo que no veo muy difícil poder alcanzar algún premio. Hemos pasado el fin de semana en Galicia entrenando y me veo más segura.
¿Es una copa muy controlada?
Es muy igualitaria. Todos los pilotos compiten con el mismo coche. No sólo tenemos que pasar las verificaciones del Nacional sino también las de la propia copa. Te miran todo, lo que está precintado y lo que no. Para ganar dependes de la pericia como conductor y la mecánica que haces se reduce a cambios de filtros y pastillas y poco más.
¿Crees que ser mujer es un hándicap para correr?
Ni mucho menos. Fátima es una gran copiloto. Canta las notas de forma muy limpia y Vanesa es una mecánico excepcional, acostumbrada a los coches de competición. Haremos un buen papel. somos un gran equipo.
¿Es un sector con pocas mujeres?
En A Coruña éramos las únicas. Puede ser porque hay poco apoyo o porque se va a los campeones. Para cambiarlo, además de ser mujer tenemos que hacerlo bien.
¿Qué preparación habéis hecho de cara al rallye?
Como bombero hago entrenamientos físicos diarios. Con el coche, no solamente técnicas de conducción, sino también maniobras y resistencia. Son muchas horas dentro del coche y tienes que hacer que este aguante y tú le aguantes a él.
Bombero, piloto, ¿cómo gestionas todo a nivel personal?
Lo que es intocable al final es tu vida profesional. Soy bombero, es mi vida y es mi pasión. Ser piloto es algo que añado. Ahora estoy en proceso de inicio y adaptación. Lo más fácil ha sido el tema de entrenar, que es algo que llevo haciendo desde siempre. Lo hago por la mañana después de dejar a mis niños en el colegio. Y el tema de las guardias la gestiono con mis compañeros.
Tu faceta de piloto ya la conocías como bombero
Sí, además de hacer todo lo demás, como bombero mi función es la de conducir el camión. Subirme en él y llegar a las emergencias lo más rápido posible. Es algo que me ha ayudado a gestionar el nerviosismo en el rally.
Vas rompiendo esquemas
No lo pienso. Soy consciente de que no hay casi chicas. Hay que hacerlo bien independientemente del sexo, si no la repercusión o las entrevistas no valen para nada. Hay que dar un paso adelante.
¿Adicta a la adrenalina?
Un poco sí. La conducción no es algo que me dé pereza. Con el camión te levantas sin saber dónde irás, lo llevas de noche, a toda velocidad y con ocho personas dentro. Sé canalizar la tensión al volante.
¿Esa filosofía la seguís en Oposur?
Preparamos a jóvenes para ser bomberos, si sale bien, les damos la enhorabuena y a preparar el siguiente examen. Si sale mal, tienen nuestro apoyo pero les tenemos que ayudar a levantarse. Tienen que aprender a reaccionar y hacerlo rápido para concentrarte en la siguiente oposición.
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