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Mis apuntes

Negocio del fuego

Hace sólo unas semanas León amanecía con el sol teñido de rojo por los terribles incendios que asolaban Galicia. No es la primera vez que se siente de cerca en la ciudad, la tragedia del fuego. Por desgracia, la brutal sequía que estamos sufriendo no ha hecho más que agudizar el problema, y seguimos a la espera de que las tan deseadas lluvias vuelvan a llenar ríos y pantanos.

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Ana Isabel Ferreras
03/11/2017 - 04:40

Se han preguntado ustedes por qué hay tantos fuegos? Parece que cada año se producen más y más incendios, cuando en otras épocas no eran tan habituales. Recuerdo en mi niñez, allá por los años setenta, los calurosos veranos en el pueblo, tanto o más que los de ahora, sin apenas sucesos de este tipo. ¿Por qué?
No se quemaba el monte porque antes el monte existía, o por lo menos era monte puro, con los árboles autóctonos del lugar, sin que la poderosa mano del hombre lo manipulase. Las grandes repoblaciones de la época franquista ya se habían puesto en marcha, pero los árboles no crecen de un día para otro y el horno no estaba listo.
A partir de las concentraciones parcelarias, la mayoría de propietarios (antes agricultores y ganaderos que hoy sólo buscan la rentabilidad fácil de lo que antes les dio de comer), se acaban lanzando a la plantación masiva de eucaliptos (mayormente en Galicia), pinos, chopos etc. siguiendo las indicaciones deliberadas de la Administración de turno (antes ICONA, hoy en día comunidades autónomas), con el cuerpo de Ingenieros de Montes a la cabeza dirigiendo el mapa repoblacional, y provocando la plantación de especies "carne de cañón" para cualquier cerilla.
Y para mayor vergüenza torera, la propia Administración crea sociedades con dinero público, para la gestión del monte y también de los incendios, además de poner en marcha empresas propias de fabricación de pellets instando y facilitando a todos los establecimientos el cambio en el modelo de calefacción. Negocio y siempre negocio que pone de manifiesto una vez más, que aquí siempre ganan los mismos ¿o es que todavía no se han dado cuenta?. Primero plantan lo que les conviene, que casualmente arde con extrema facilidad. Luego echan la culpa a cualquiera que queme rastrojos, hablan de mafias (habría que investigar quién está detrás) y al final procesan el resultado del monte, tanto si se quema como sino. ¿Ya lo van viendo?

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