Las dos joyas del circuito de ciudades de arte de la región Emilia Romaña ofrecen estancias inolvidables gracias a una mezcla única de monumentos y bellezas históricas, enogastronomía típica, relax termal y visitas a los “mitos” de la “Motorvalley”, museos de las empresas Ducati y Ferrari y colecciones privadas.
Bolonia es una ciudad de las dos caras: la de los monumentos y enogastronomía típica en el centro histórico y la subterránea que se puede visitar en lancha – Visitas imprescindibles en los alrededores de Bolonia a la Bodega Regional de Dozza y el Circuito Internacional Enzo y Dino Ferrari de Imola. Mientras, Módena, con sus joyas de la Unesco, el encanto de Ferrari y los sabores inconfundibles del Lambrusco y el Aceto Balsámico Tradicional.
Bolonia: arte y cultura
Bolonia transmite una alquimia especial: es una ciudad de arte y cultura, pero al mismo tiempo muy joven.
Cuenta con 12 museos municipales, uno estatal, cuatro eclesiásticos, cuatro privados, 16 museos de la Universidad, un precioso Museo Judío y el nuevo “Genus Bononiae”, “museo extendido” que incluye algunos de los más preciosos edificios históricos del centro de Bolonia. (http://www.genusbononiae.it/). Al mismo tiempo, gracias a la presencia de muchos jóvenes estudiantes de la prestigiosa Alma Mater, clase 1088, la universidad más antigua del mundo, la ciudad “felsinea” (así llaman a Bolonia) ofrece muchísimas ocasiones para pasar una noche única, entre conciertos, espectáculos, cine de autor y eventos enogastronómicos.
Paseando por el centro histórico, entre la Plaza Mayor (Piazza Maggiore), una de la plazas más bellas de Italia, y el mercado medieval, el tiempo pasa muy rápido, entre boutiques, cafés históricos y antiguas tabernas. Es difícil establecer qué es lo primero que llama la atención, si la Basílica de San Petronio (Basilica di San Petronio), el Palacio de Accursio (Palazzo d’Accursio, sede del Ayuntamiento) o el Palacio del Archiginnasio (Palazzo dell’Archiginnasio), construido en 1563 para alojar la universidad y que actualmente es una biblioteca monumental (750.000 volúmenes).
Módena: patrimonio unesco
También la Unesco ha sido conquistada por la belleza histórica de Módena. En el centro se pueden admirar tres obras de arte: La Plaza Grande (Piazza Grande), la Catedral Románica (il Duomo Romanico) completamente recubierta de mármol blanco (considerada una de la más bellas de Europa) y la Torre de la Ghirlandina, así llamada por sus balaustradas de mármol, bellas y elegantes como guirnaldas que se retuercen en torno a una aguja.
Un trío ganador el de estos monumentos en el centro de Módena que en 1997 han sido declarados “Patrimonio de la Humanidad de la Unesco”. Y si todavía queréis más belleza, no muy lejos se puede visitar el Teatro Comunal dedicado a Luciano Pavarotti y el Mercado cubierto Liberty en via Albinelli.
El centro histórico es también un gran mercado al aire libre, donde se pueden encontrar tiendas de enogastronomia para degustar y comprar productos típicos de la cocina modenesa: “Tortellini”, “Lambrusco”, “Zampone”, “Aceto Balsamico Tradizionale”, “Gnocco Fritto”, “Tigelle” y embutidos típicos. Y para quién ame el lujo y la velocidad sobre cuatro ruedas, visita imprescindible es la Galleria Ferrari en Maranello.
