viernes, 19 de abril de 2024 21:31 www.gentedigital.es facebook twitter

Gente en León

Logotipo diario gente
Kiosko. Portadas de periódicos
Un amigo de León

¡Toma majo, para que tomes café!

Ya estamos metidos de lleno en las fiestas navideñas que cada año celebramos los cristianos y los no cristianos hasta nuestros días. Son fiestas de cara y cruz. Unos las celebran con la unión de la familia que, en muchos casos, aprovechan las mini vacaciones para reencontrarse con los suyos, a pesar de la distancia.

Archivado en: Maximino Cañón, fiestas, Nochebuena, Feliz 2016, nuevas elecciones

aumentar texto reducir texto imprimir enviar noticia comentar

Maximino Cañón
30/12/2015 - 03:30

Otros, por el contrario, y con desgracias recientes o con los seres queridos lejos, se pasan los días mirando para el calendario a ver cuando pasan estas fechas que avivan los recuerdos. Apuntando a los primeros, estas festividades, además de las conmemoraciones cristianas, facilitan el reencuentro. Sin querer meter el dedo en la herida, las cenas venideras, son para el cabreo familiar en muchos casos, lo cual, a nuestra manera forma parte del menú navideño. Las cosas con el tiempo, como todo, cambian. Muchos se acordarán de cuando el turrón y las peladillas reinaban en las comedidas mesas navideñas: un trozo del duro, otro del blanco y alguna peladilla constituían el mejor postre en la cena de Nochebuena. También, en algunos hogares, se permitía echar un cigarrillo de ‘rubio' a las mujeres y chicos, advirtiendo claramente de la excepcionalidad del momento. Como colofón, en la mayoría de las casas, una copa de sidra ‘El Gaitero', famosa en el mundo entero, y aquí más.
También, siguiendo la tesis de la buena armonía y lo que el día de nochebuena representaba, se accedía a tomar un chato de ‘Tío Pepe' o de ‘Moriles' mientras se entonaban villancicos y si eran críticos con el régimen, mejor. En una de éstas, al finalizar el feliz encuentro, y antes de dirigirse a la suculenta cena de la Nochebuena, un camarero le ayudaba a D. Demetrio, apreciado vecino del barrio, a ponerse el abrigo y al finalizar este le dijo, al citado camarero, gracias por la ayuda y ¡toma salao!, ¡para que tomes café!, entregándole algo en la mano que el resto no pudo apreciar, lo que provocó la curiosidad en los parroquianos del bar que se dirigieron al servicial barman: ¿Cuánto te dio? No lo creeréis, pero al darme las gracias y decirme lo de "toma, para que tomes café" , no me engañó ni se excedió en cantidad alguna, sino que "me dio un terrón de azúcar" en la mano. Y es que en estas fechas también la burla estaba a flor de piel, y eso que no había elecciones.
¡Feliz 2016! y tranquilos, que a lo mejor hay que elegir de nuevo.

añadir a meneame  añadir a freski  añadir a delicious  añadir a digg  añadir a technorati  añadir a yahoo  compartir en facebook  twittear 
Gente Digital en Facebook

Grupo de información GENTE · el líder nacional en prensa semanal gratuita según PGD-OJD
Desarrollado por Tres Tristes Tigres