"Cuando comencé a escribir me plantearon eliminar algunas escenas o bajarlas de tono"
La escritora catalana presentará este viernes, a las 18:30 horas, su última novela en el I Festival de Literatura Juvenil de Tres Cantos. Misterio, pasión y romance son las claves de esta historia.
"Existe muy buen ambiente entre los escritores de literatura juvenil"
gentedigital.es/Sandra Bravo
14/3/2014 - 09:59
Mientras muchos cambiaban cromos en el recreo, Esther Sanz crecía leyendo los clásicos de las hermanas Brontë y las páginas de Corín Tellado y es que, desde pequeña, ya sabía que lo suyo era la novela romántica. La autora de la saga 'El bosque' presentará la novela 'Si el amor es una isla' (DESTINO) este viernes dentro del marco del I Festival de Literatura Juvenil, que se celebrará del 14 al 16 de marzo en Tres Cantos.
La escritora, que charlará con los lectores a partir de las 18:30 horas, asegura que entre los autores de novela juvenil "existe muy buen ambiente". "Es una cosa que he detectado cada vez que he ido a Madrid a alguna ponencia o mesa redonda y he coincidido con varios autores, nos alegramos por los logros de los demás, publicamos casi al mismo tiempo y nos gusta ver nuestros libros juntos en la estantería de la tienda", apunta entre risas esta catalana.
Si hay una cosa que caracteriza a las novelas de esta autora es la normalidad con la que habla sobre la sexualidad. "Cuando empecé a escribir novela juvenil sí que me plantearon eliminar algunas escenas o suavizarlas. En mi defensa señalé que si en 'Los Juegos del Hambre' se hacía tan detallada la violencia no entendía por qué, una cosa tan bella como es el sexo, no se podía profundizar en ello. Yo creo que si lo haces con buen gusto, sin caer en lo vulgar o en lo cursi y de una forma natural, los lectores te lo agradecen", explica Sanz.
En su nuevo libro 'Si el amor es una isla', también habrá romance y mucho misterio. La historia gira en torno al personaje de Luisa, una joven que dejará atrás Barcelona y un antiguo tortuoso amor para empezar de cero como doncella en un lujoso hotel de una pequeña isla en el Canal de la Mancha. Allí, la protagonista, curiosa y entrometida, deberá de vivir bajo las estrictas normas de la fortaleza y de su propietario, un hombre misterioso que nunca se deja ver: "Aprovecha las noches para salir, lleva una máscara y es muy arisco con los empleados. Así que entre lo que ha visto Luisa, lo que le cuentan y lo que ella se imagina hay un cóctel tremendo en su cabeza" explica la autora, al mismo tiempo que añade, "a través de las notas que él escribe, será irremediable que se termine colgando de él".
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