Pilar Eyre: "Es tan aburrido hablar de la Monarquía como de que el sol sale cada día"
La periodista catalana, que se ha convertido en la finalista del Premio Planeta, asegura que los Reyes cumplen con su papel.
Eyre sigue presentando su novela· RAFA HERRERO
"Hay políticos muy honrados, pero cuatro sinvergüenzas les desprestigian"
gentedigital.es/Mamen Crespo
14/11/2014 - 09:29
El apoyo masivo del público a todos sus libros durante años ha dado su fruto en forma de premio. Y es que el jurado del Premio Planeta, el más importante de nuestro país, le ha galardonado con el finalista por 'Mi color favorito es verte', donde Pilar Eyre convierte en novela un episodio de su vida.
Después de un éxito indiscutible con tus anteriores novelas, ahora eres finalista del Premio Planeta, ¿cómo te quedaste?
Al contrario de lo que piensa la gente, que dicen que es un premio que está dado, yo me enteré en el mismo momento en que lo dijo Carmen Posada. La verdad es que fue una sorpresa, una satisfacción, he trabajado mucho y, en cierta manera, he luchado mucho para tener esto. La única pena es que mis padres no lo han podido ver.
¿Tienes miedo a defraudar? A ti la gente te conoce, pero habrá quienes vean que el libro es finalista del Premio Planeta y lo compren sólo por eso.
Siempre tienes el temor de pensar que, a lo mejor, lo que tú has querido decir no llega a la gente. Pero, en este caso, ha pasado por tantos filtros y había libros tan buenos en la final, que pienso que si le han dado el premio es porque lo merece. Además, sé que es una historia muy potente. No sé si volveré a tener a mi disposición un argumento tan importante como éste. Engancha.
Esa historia es la tuya. ¿Cuándo y cómo decides que vas a abrirte así y a exponer públicamente esa parte de tu vida?
En agosto del año pasado yo conocí a Sebastian. Vivimos una historia de amor apasionante y apasionada, era una cosa obsesiva y delirante, y me dejó inútil para otra cosa, porque yo sólo pensaba que mi vida giraba a su alrededor. Al final mi hijo se dio cuenta del motivo por el que había adelgazado tanto, hasta el punto de que los pantalones me los podía poner sin desabrochar y se me caían los anillos, los dientes, las pestañas... Realmente estaba enferma de amor. Se lo conté a mi hijo y me preguntó si me había pasado de verdad, que era una historia muy buena y que tenía que escribirla. Tenía el permiso de mi hijo, que es la persona que más me importa, así que adelante.
¿Te has planteado que es tu vida la que es finalista del Premio Planeta?
La verdad es que sí; pero también es cierto que, aunque los hechos son reales, es una novela lo que yo he construido a partir de nuestra historia. Ahí está la habilidad de convertir esto en una novela interesante. He escrito casi 20 libros, llevo casi 35 años como periodista, y la verdad es que todos mis conocimientos los he vertido en este libro. Fue como una catarata: lo escribí todo, pero luego estuve horas, y horas y horas para corregir y conservar la frescura mientras conseguía un buen texto, que creo que es lo que me ha dado el premio.
¿Qué crees que ha faltado para llevarte el Planeta?
Ellos tienen sus razones. El libro de Jorge Zepeda (ganador del Premio) es muy bueno. Además, también es cierto que se ha de cuidar el mercado latinoamericano. Hacía muchos años que no se daba ningún premio a un autor latinoamericano.
¿Tienes miedo a las críticas por lo que cuentas en tu novela?
Me pasó una cosa muy curiosa, y es que cuando gané el premio, esa noche en Barcelona, hicieron una rueda de prensa en la que había cientos de medios. Yo tenía miedo de que viejas rencillas de esta profesión, que puede ser miserable o puede ser gloriosa, asomaran la cabeza y dijeran alguna cosa que me iba a doler, pero no. Todo lo que he tenido ha sido agradable, cariñoso, todo el mundo se ha alegrado muchísimo, he recuperado viejas amistades, compañeros que hacía siglos que no veía… Todos me han enviado un abrazo y lo están celebrando. Mi peluquera invitó a champán.
Muchos periodistas no quieren definirse como escritores, sino como periodistas que escriben. En tu caso, está claro que sí eres una escritora.
Francisco Umbral decía que era una redundancia decir escritor y periodista. No sé. Soy periodista en activo y sigo escribiendo, y las dos facetas me encantan. El periodismo es la sangre que alimenta mis venas y trabajaría gratis, pero mis libros, para mí, es donde me transformo y lo echo todo.
¿Cómo valoras las tramas de corrupción que han salido a la luz en las últimas semanas?
Es una canallada que nos están haciendo a todos. A mí me da mucha rabia que se meta a todo el mundo en el mismo saco. Yo siempre pienso que hay muchos políticos que quieren servir a la sociedad, que trabajan con sueldos muy pequeños, y todo esto se ve ensuciado por la actuación de cuatro sinvergüenzas. Yo conozco a políticos muy honrados, pero, desgraciadamente, estos tíos lo que hacen es desprestigiar a la clase política en general. Lo de Pujol, que yo soy catalana, nos ha hecho mucho daño no sólo porque ha robado, sino porque ha puesto en tela de juicio a todos los políticos catalanes.
Muchos de tus libros anteriores han estado dedicados a la Monarquía. ¿Cómo ves en la actualidad a la institución?
A mí me pasa una cosa muy curiosa con esto de la Monarquía, que yo no sé si es bueno o malo, y es que me aburre. Igual que antes todo lo que ataña a la Monarquía despertaba pasiones, ahora todo esto se ha diluido. Tenemos unos Reyes que cumplen con su papel y que lo hacen bastante bien, y para mí es una institución aburrida. Quizá es bueno que lo sea, en Inglaterra también es aburrida, todas son aburridas. Debe ser que la institución está ya tan consolidada, que en la sociedad hemos asumido que tenemos unos Reyes. Esto se ha convertido en parte del paisaje y es tan aburrido hablar de los monarcas como de que el sol sale cada día.
Para terminar, ahora te toca una promoción extensa con el libro, pero imagino que tienes otros proyectos en mente y que tu futuro pasa por seguir escribiendo.
La verdad es que sí. Esto ha sido un acicate, aunque no lo necesito porque soy muy trabajadora, pero ha sido un incentivo tremendo para seguir escribiendo. Tengo proyectos de varios libros en mente, estamos barajando si seguir con ficción o con no ficción, y con la ilusión de volver a escribir. Aunque esta gira durará tres meses o así, y luego vendrán las traducciones.
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