Integración y deporte se dan la mano en el Luis Aragonés
El distrito de Hortaleza celebra la XI edición de la Jornada de Natación Recreativa.
gentedigital.es/Francisco Quirós
28/11/2014 - 09:41
Risas, chapuzones y, sobre todo, mucha diversión. El distrito de Hortaleza celebró la semana pasada en el Centro Luis Aragonés la XI edición de la Jornada de Natación Recreativa, una actividad dirigida a alumnos con discapacidad intelectual y física de los Centros de Educación Especial de la zona. Al margen de aumentar el desarrollo de la psicomotricidad motórica y capacidad psíquica de los participantes, esta jornada también busca prevenir el aislamiento personal, aumentar la capacidad motórica y potenciar el hábito de la convivencia.
En esta edición se congregaron un total de 232 alumnos, confirmando la progresión en el número de participantes que repasa Javier Fernández Gandoy, director de centros y actividades físico-deportivas: "En la primera jornada partíamos con muchísimo miedo, tanto los directores de los colegios como nosotros, porque son niños muy especiales y esto era algo innovador. Recuerdo que en la primera edición había alrededor de 120 ó 130 niños, todos estábamos muy expectantes a ver qué era lo que pasaba, con ese miedo escénico que genera el no saber qué resultado se iba a dar", recuerda.
INICIOS CON DUDAS
Fernández fue una de las personas encargadas de poner este proceso en marcha. "Esto parte de una propuesta que nos hacen los propios colegios. Ellos estaban interesados en hacer algo distinto, por lo que en una reunión que tuvimos, tanto la parte política, como los directores y coordinadores pedagógicos de los centros, comenzamos a trabajar. Empezamos a dar forma al proyecto, mezclando sugerencias pedagógicas y deportivas", recuerda al mismo tiempo que valora el hecho de que estas jornadas sean "únicas en Madrid y estupendas para los niños".
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UN DISTRITO CON AMPLIA EXPERIENCIA: Estas jornadas de Hortaleza son únicas en toda la capital, aunque Javier Fernández recuerda que "en su día el distrito contó con otras que se hacían en el campo del fútbol, consistentes en una 'yincana' deportiva en la que participaban niños especiales y ordinarios. Era una actividad de integración, donde todos se ayudaban entre sí. La desgracia es que llegó la crisis y se tuvieron que suspender, pero yo espero que se reactiven por el bien del deporte", finaliza. |
Las actividades programadas se desarrollan a lo largo de tres horas, pero el proceso de planificación conlleva más tiempo de trabajo, "unos 15 ó 20 días de esfuerzo muy serio", cifra Javier Fernández, pero toda esa labor acaba obteniendo una recompensa que va más allá del punto de vista profesional: "En 2013 tuvimos una niña de 5 años procedente de Perú. No se había podido bañar nunca. Le pusimos todos los elementos de seguridad y a la mitad de la jornada nadaba de forma libre. Cuando terminó la jornada empezó a llorar porque quería seguir allí", evoca Fernández.
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