La edificabilidad, último escollo para la Operación Chamartín
Las partes implicadas trabajan en la reducción de la superficie de construcción en este ámbito. El concejal del Área de Desarrollo Urbano, José Manuel Calvo, explica que se han llegado ya a "acuerdos sensatos" que antes no eran asumidos.
Archivado en: Operación Chamartín, José Manuel Calvo, Adif, Distrito Castellana Norte, Desarrollo Urbano Sostenible
Miguel Hernández
12/5/2017 - 09:21
Se acerca el mes de junio, fecha fijada en el horizonte por los actores implicados en el desarrollo de la zona Norte de la ciudad para cerrar un preacuerdo que, tras más de 20 años, desbloquee la primigenia Operación Chamartín versionada por Distrito Castellana Norte del grupo San José y por el proyecto municipal Madrid Puerta Norte, y poco a poco se van conociendo los detalles a pesar del hermetismo que rodea los contactos entre las partes.
Según confirman desde el Área de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS), se celebran reuniones semanales dentro de su departamento y también con responsables del resto de partes implicadas para "afinar los detalles técnicos" de cara a alcanzar el acuerdo necesario, la última la semana pasada.
"Nos queda definir en que se va a traducir la reducción de edificabilidad", explica a GENTE el concejal de DUS, José Manuel Calvo. "Esperamos que el acuerdo esté en el mes de junio, pero por prefijar una fecha no podemos condicionar una decisión muy compleja. Preferimos avanzar, negociar y que la fecha de cierre del preacuerdo se produzca cuando se tenga que producir", añade.
UN PLAZO CORTO
"Venimos de 24 años en los que no se ha podido poner en marcha este desarrollo por el mal diseño de la operación y por planes que no eran creíbles y que no fueron aprobados. Seis meses es un plazo demasiado corto, exigente para las tres administraciones, porque hay mucho en juego", explica Calvo.
El edil de Ahora Madrid asegura que el proceso de negociación se encuentra "en un punto bastante positivo". "Ya hay una serie de elementos que se han acordado. Tenemos que ir a un nuevo proyecto que se debe traducir en una modificación puntual del plan general. También debemos ir a una revisión de las cargas de cada administración y de la edificabilidad y pensamos que el ámbito se tiene que partir al menos en dos: al Norte y al Sur de la M-30", argumenta.
CAMBIO DE PLANES
Por otro lado, alude a la modificación de la ubicación definitiva del centro de negocios del nuevo desarrollo urbanístico. "Debe situarse en el entorno de la estación y no en la mitad del ámbito como se planteaba en el anterior proyecto. Además, la actuación tiene que tener una relación armónica con los barrios del entorno. Todo son ya acuerdos entre las tres partes, acuerdos muy sensatos, que hasta ahora no era asumidos ni por el Ministerio de Fomento ni por el banco", concluye el concejal.
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