El plan no cuenta con el respaldo de la Dirección General de Patrimonio, pero el Ayuntamiento de la capital asegura que cumplirá con todos los requerimientos
Archivado en: Urbanismo, Plaza de España, Patrimonio
GENTE
03/11/2017 - 10:56
El proyecto de remodelación de Plaza de España, presentado la pasada semana por el Ayuntamiento de Madrid, no cuenta con el aval de la Dirección General de Patrimonio, requisito imprescindible para su ejecución. Los puntos de conflicto: la valla de los Jardines de Sabatini, que el plan pretende eliminar, y las implicaciones arqueológicas de la prolongación del túnel de la calle Bailén hasta Ferraz. Para seguir con sus planes urbanísticos el equipo de Gobierno municipal deberá presentar una propuesta para la transición entra la cuesta de San Vicente y los jardines y una actuación arqueológica previa.
OBSTÁCULOS
"Vamos a cumplir con todos los requerimientos de Patrimonio", avanzaron fuentes de Desarrollo Urbano Sostenible, que insistieron en negar conflictos con la Comunidad en la reunión que mantuvieron el pasado 21 de julio. Sin embargo, esta misma semana, durante la celebración del Pleno municipal del pasado martes, el delegado del área, José Manuel Calvo, no dudó en asegurar que Paloma Sobrini, directora general de Patrimonio, "ha iniciado un proceso para obstaculizar Plaza de España", aunque aseguró que el proyecto se ejecutará "como estaba previsto".
La Comunidad no es la única que ha expresado sus reticencias con algunos aspectos de este proyecto, que, además, no se corresponde exactamente en su versión final con la propuesta votada por los madrileños. La asociación Madrid Ciudadanía y Patrimonio también se opone al derribo de una parte de la valla de los Jardines de Sabatini, así como al giro de 180 grados del monumento a Cervantes, al ser contrarios a las intenciones de los autores.
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