El ateísmo levanta la pasión en Semana Santa
La Delegación del Gobierno en Madrid ha decidido prohibir la conocida como 'procesión atea', convocada por la Asamblea Vecinal La Playa de Lavapiés y la Asociación Madrileña de Ateos y Librepensadores (AMAL), entre otras asociaciones, para el próximo Jueves Santo por las calles de Lavapiés.
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Los 'buses ateos' fueron una iniciativa promovida por AMAL.
gentedigital.es/Marcos Blanco Hermida
15/4/2011 - 11:37
Después del paseo que tuvo por varias administraciones la solicitud del permiso para llevar a cabo esta convocatoria, la resolución definitiva ha dicho 'no' a la propuesta, un acto que AMAL consideraba, antes de esta probable conclusión, un hito que permitiría comprobar el grado de aconfesionalidad del Estado.
La procesión, que incluía tres posibles itinerarios, saldría de la plaza de Antón Martín a las 19 horas y llegaría a la plaza de Lavapiés con el objetivo de llevar a cabo un acto "alegre, divertido y crítico con la institución, no con los dogmas y ritos católicos", indica Luis Vega, presidente de AMAL, asociación que deseaba poner en relieve "la hipocresía social y moral que representa la Semana Santa Católica". Según el cartel promocional, la marcha contaría con Pasos de la Cofradía de la Virgen del Mismísimo Coño, la Congregación de la Cruel Inquisición y La Hermandad de la Santa Pedofilia.
En primer lugar, los organizadores se dirigieron a la Delegación del Gobierno en Madrid para comunicarla, pero allí les remitieron al Ayuntamiento tras entender que las procesiones no entran dentro de sus competencias. El Consistorio emitió un informe desfavorable a su celebración, ya que la convocatoria se excluye del ámbito de la Ley Orgánica 5/1980, de 5 de julio, de Libertad Religiosa y advertía que, de autorizarse, se podían ocasionar problemas de orden público. Para el Gobierno local resultaba obvio que se trataba de una manifestación y devolvía la decisión a la Delegación del Gobierno. Los convocantes, sin renegar del término procesión, presentaron una nueva petición como manifestación y, tras solicitar un informe a la Abogacía del Estado, el departamento rechazó la solicitud.
La Delegación argumenta la coincidencia en día y hora con las procesiones católicas, su cercanía a una de ellas y el hecho de que discurrirá por calles con parroquias y nombres cristianos. Asimismo, indican que la Jefatura Superior de Policía, el Ayuntamiento o la Abogacía del Estado han expresado una "apreciación unívoca" para que no se celebre. La organización pretende recurrir la decisión ante la Justicia, aunque, debido a la burocracia, creen que "ya no se va a hacer".
NUMEROSAS CONSIDERACIONES EN LA NEGATIVA
El comunicado señala que la decisión se ha tomado "en estricto cumplimiento de la legalidad" y teniendo en cuenta todos los informes emitidos sobre la convocatoria, los carteles anunciadores y las declaraciones de los organizadores en los medios. La negativa también consideró la serie de "imágenes (pasos) que discurrirían por la manifestación, que aluden de forma crítica a la iconografía cristiana". Asimismo, considera "la necesaria protección de la imagen turística de la ciudad" ante la gran afluencia de público.
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