Coronavirus.- Mercamálaga contabiliza 7.600 toneladas de fruta y verdura y 669 de pescado en estado de alarma
El Mercado Central de Abastecimiento de Málaga (Mercamálaga), que continúa garantizando el suministro a mercados municipales de la capital y de la provincia y tiendas minoristas de la ciudad, contabiliza desde el 14 de marzo, cuando se decretó el estado de alarma por coronavirus, 7.600 toneladas de fruta y verdura y 669 de pescado y marisco y se ha producido un tránsito de 12.642 vehículos.
26/3/2020 - 12:09
MÁLAGA, 26 (EUROPA PRESS)
El Mercado Central de Abastecimiento de Málaga (Mercamálaga), que continúa garantizando el suministro a mercados municipales de la capital y de la provincia y tiendas minoristas de la ciudad, contabiliza desde el 14 de marzo, cuando se decretó el estado de alarma por coronavirus, 7.600 toneladas de fruta y verdura y 669 de pescado y marisco y se ha producido un tránsito de 12.642 vehículos.
Así, según han informado desde Mercamálaga en un comunicado, estos datos se traducen en una entrada de 17 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior de toneladas de fruta y verdura.
También los datos suponen un 39 por ciento menos de pescado y marisco debido al cierre total de bares restaurantes y sector hotelero, lo que se ha traducido en un tránsito del 30 por ciento menos vehículos, por el mismo motivo.
Por otro lado, han recordado que el mercado mayorista de Málaga afronta esta situación de estado de alarma asumiendo las medidas que, desde los distintos ministerios, se han establecido en materia de desplazamientos, normas laborales, distancias de seguridad, y todas las medidas sanitarias establecidas por el Gobierno.
También Mercamálaga ha incidido en que hay mercancías suficientes para abastecer a la población del entorno, y que desde el mercado mayorista se abastecen los pequeños comercios y los mercados municipales de la provincia, y ahí tienen todos los productos que se necesitan para la alimentación diaria.
Por ello se anima a los ciudadanos a acudir a los mercados y a las tiendas de barrio para adquirir sus productos, siempre que los deslazamientos se produzcan por el tiempo imprescindible, preferentemente en el entorno inmediato de sus domicilios y cumpliendo las disposiciones previstas por el estado de alarma.