La Junta hará un estudio para evitar los efectos de las tormentas en Santa María de Huerta y el monasterio cisterciense
La Junta de Castilla y León realizará un estudio para evitar los efectos de las tormentas en Santa María de Huerta, después de las avalanchas que este martes afectaron a calles e inmuebles de la localidad por las lluvias intensas que, además, arrastraron un muro del cementerio.
26/6/2015 - 16:19
SORIA, 26 (EUROPA PRESS)
La Junta de Castilla y León realizará un estudio para evitar los efectos de las tormentas en Santa María de Huerta, después de las avalanchas que este martes afectaron a calles e inmuebles de la localidad por las lluvias intensas que, además, arrastraron un muro del cementerio.
Así lo ha anunciado este viernes la secretaria general de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, Carmen Ruiz, que ha visitado la localidad junto al director general de Patrimonio Cultural, Enrique Saiz, y el delegado territorial, Manuel López, acompañados por la alcaldesa, Mercedes Aguilar, y el abad del monasterio cisterciense, Isidoro Anguita.
"Afortunadamente, a pesar de lo llamativo y de lo tremendamente molesto para los vecinos, no se ha producido ningún daño insalvable, ni desde el punto de vista de las infraestructuras civiles ni del patrimonio de este impresionante monasterio", ha asegurado Ruiz, quien ha comprometido el apoyo y colaboración "para volver a la normalidad y reparar los daños que se han producido"
Al día siguiente de los hechos, el consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez, contactó con la alcaldesa para interesarse por los daños registrados en la localidad y trasladarle el "compromiso" de la Junta y prestar el apoyo que fuese "necesario".
A través de la Delegación Territorial, la Junta movilizó hasta la localidad una cisterna nodriza, un camión y una excavadora mixta para limpiar y evacuar las piedras y el barro de las calles y espacios públicos.
En la visita de este viernes se han comprobado los efectos causados por las inundaciones y la labor de limpieza efectuada en las calles del municipio y en el propio monasterio, en el que aún continúan.
EVITAR ESTAS SITUACIONES
Por su parte, el director general de Patrimonio Cultural, Enrique Saiz, ha explicado que se trata de analizar la situación y ver "cómo ayudar y, sobre todo, cómo prevenir en el futuro este tipo de desastres", y se ha comprometido a encargar los estudios técnicos "oportunos" para ver si con unos medios proporcionados se pueden evitar estos efectos en el futuro.
"Existe la necesidad de atajar en el futuro cuestiones que no solo tienen que ver con los efectos de un episodio de una tromba de agua, sino también con la presencia constante de humedad" ha aseverado Saiz, quien ha precisado que el terreno que circunda el monasterio es más elevado y por ello se registran humedades "continuas", no solo los días de tormenta.
Saiz ha apuntado a la conveniencia de llevar a cabo trabajos de saneamiento para alejar el agua lo más posible de los muros, aunque "la fuerza de la naturaleza busca, una y otra vez, su cauce natural".
El abad del Monasterio, Isidoro Anguita, ha recordado que periódicamente acontecen sucesos de este tipo, como la última avalancha de 1996, que fue "algo parecido" a lo de esta semana, pero en aquella ocasión solo afectó a la zona del monasterio y, en esta, al romperse el muro de contención, a todo el cementerio.
"Sabemos que se va a repetir. Hay que estar preparados, aunque es cierto que los desastres naturales nadie los puede controlar, pero es misión nuestra estar un poco preparados para atenuar los daños lo más posible, porque si el muro de contención de la parte del Monasterio se rompe, este se inunda completamente, como ya sucedió en varias ocasiones en el pasado", ha estimado Anguita.
El abad ha agradecido el interés y la presencia de los representantes de la Junta también ha tenido palabras de agradecimiento para el ayuntamiento y para "el comportamiento del pueblo", pues han sido "numerosos" los vecinos que se han mostrado voluntarios para colaborar con las tareas de limpieza del monasterio.
LOS DAÑOS EN EL MONASTERIO
Tras el recorrido por el monasterio, Enrique Saiz ha declarado que los efectos "no han sido importantes" en lo que se refiere a la afección de los elementos patrimoniales, sino que son cuestiones que tienen que ver, en mayor o menor medida, "con el trabajo que está ocasionando a la propia Comunidad", a la que ha agradecido el "cuidado continuo" de una "joya" que, desde el punto de vista cultural y turístico es de "toda la sociedad".
"Como habitadores, propietarios y gestores del Monasterio lo mantienen día a día con una tarea magnífica de conservación y, en este caso, además, abordando unas tareas extraordinarias de limpieza, que es lo que fundamentalmente ha producido el efecto de la introducción de agua en el suelo de la capilla de la nave mayor de la iglesia y de algunas otras zonas del Monasterio, como la Capilla de Las Reliquias".
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