Taller de dermatitis atópica a cargo del Hospital de Torrejón
El Servicio de Dermatología del Hospital Universitario de Torrejón, integrado en la red pública de Hospitales de la Comunidad de Madrid, ha organizado un taller práctico para que los pacientes puedan aprender cómo manejar la dermatitis atópica, identificar los primeros síntomas y saber cómo actuar.
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gentedigital
11/11/2013 - 17:48
"Es una de las patologías de la piel que se dan con mayor frecuencia y al detectar el interés de los pacientes nos decidimos a realizar este taller en el marco de nuestra Escuela de Pacientes", ha explicado la doctora Leticia Calzado, jefa del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario de Torrejón.
El taller, que ha tenido lugar en el Centro de Especialidades, ha hecho un recorrido práctico sobre los principales hitos y mitos de la enfermedad. "En los últimos años se ha producido un aumento de esta patología. La vemos cada vez más en la consulta y en algunos casos existe un gran desconocimiento. La dermatitis atópica es una enfermedad crónica y no contagiosa que produce el picor y la inflamación de la piel, acompañada de piel seca, descamativa y con escozor. Es muy frecuente en niños. Habitualmente aparece en las flexuras de las piernas, los brazos y la cara, aunque hay situaciones en las que los pacientes pueden tener lesiones más diseminadas, con afectación generalizada", han explicado los doctores Javier Alcántara y Lucía Pérez, médicos dermatólogos del Servicio de Dermatología de dicho hospital.
Aunque la dermatitis atópica tiene un origen individual, genético, en nuestro entorno hay sustancias agravantes como la exposición a factores irritantes, como detergentes y jabones, y algunos productos del cuidado de la piel que contienen perfumes. Además, existen otros factores, como los cambios de temperatura. "En otoño esta patología aparece con más frecuencia y los brotes agudos son más comunes. Durante el verano, en cambio, los pacientes suelen mejorar". La dermatitis atópica no tiene un tratamiento curativo, pero sí se puede controlar y, fundamentalmente, se puede prevenir, en ocasiones con medidas cotidianas que pueden beneficiar a los niños que la padecen. "Este es el objetivo del taller: que los pacientes y sus padres puedan identificar los síntomas cuando aparezcan para que puedan empezar el tratamiento cuanto antes y que incorporen a sus rutinas los cuidados que mantengan esta piel más cerca de estar sana", ha añadido la doctora Calzado.
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