Encastes
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Tras la reciente defunción de la legendaria ganadería de D. Atanasio Fernández, nos llega la noticia de la desaparición de los famosos patas blancas-característica fenotípica más común del encaste Vega Villar- de la ganadería salmantina de Sánchez Cobaleda , debido a "una situación administrativa imposible en la que las bajas veterinarias no hacían viable el sostenimiento de la vacada". El vacío sanitario ha sido la causa de la desaparición de este encaste. Conviene recordar que el vacío sanitario consiste en una serie de medidas higiénico-sanitarias a tomar en las ganaderías ( limpieza, desinfección, etc.) durante el tiempo que transcurre entre la retirada de un lote y la incorporación de la siguiente crianza, de forma de asegurar que las enfermedades no se transmitan de un lote a otro . En ocasiones, las condiciones exigidas por la administración son tan drásticas y costosas que conllevan a sacrificar un número tal de reses que hacen a las explotaciones insostenibles económicamente. Pero una cosa es la desaparición de una raza por el vacío sanitario y otra muy distinta la desaparición por "vacío de despachos", o sea, porque las figuras del toreo no quieran ver ni en pintura animales de cierto tipo de encaste. Veamos si no: los patas blancas a que nos referimos, tienen otros "hermanos " en Extremadura y Salamanca a los que les ha afectado el segundo "vacio" , o sea, el de los despachos. Ganaderías de puro encaste Vega Villar ( en las dos ramas, Galache o Cobaleda) tenemos , en Extremadura la de Monteviejo, de Victorino Martín; en el campo charro, las de Barcial, propiedad de D. Arturo Cobaleda, la de D. Francisco Galache, propiedad de D. Francisco Galache Cobaleda; la de los Majadales, propiedad de la familia Tabernero Martín; la de D. Justo Nieto, propiedad del mismo y la de D. Alicio Tabernero, propiedad de D. Jesús Tabernero. Algunas de ellas medio desparecidas pues hace años que ni se estrenan. Todo esto en lo que se refiere al puro encaste Vega Villar.¿ Les suena a Vds. dónde lidian estas ganaderías?. ¿Les suenan las figuras del toreo que se apuntan a estos encierros?. Son ganaderías otrora punteras y pedidas por las verdaderas figuras del toreo desde Manolete a Manuel Benítez "El Cordobés" pero que ahora están en el más puro ostracismo. Es muy difícil que las figuras se enfrenten a los toros bravos y encastados; mientras sigan exigiendo un tipo determinado de encaste , el público no conocerá otro tipo que no sea aquél. O sea, que no hacen falta vacíos sanitarios ni exigencias fuera de tono de la administración. Bastaría con que las figuras dieran el paso adelante y no tuvieran inconveniente alguno en torearlos en plazas de responsabilidad. Claro, se puede alegar , y es verdad, que históricamente han desaparecido los encastes que "no ha evolucionado"... Que no han evolucionado cómo y para quién...?. Digamos que no se han adaptado a las modas del momento, a las características de los toros de cada tiempo. Efectivamente, hay plazas y no sólo Madrid, que exigen un toro-búfalo, mucho más voluminoso y pesado que el que pueda resultar de los cruces a los que nos referimos, que, aunque astifinos los animales, son bajos de agujas y con poco cuerpo y en este caso ya no son los toreros, sino los propios aficionados los culpables de su rechazo en ciertas plazas y por tanto de su desaparición; los ganaderos si no venden un tipo de producto, lógicamente lo sacrifican ; los empresarios por su parte están a las órdenes de las figuras del toreo que son quienes les llenan las arcas. Aquí tenemos, pues, un abanico de culpables: toreros, aficionados, ganaderos y empresarios: entre todos la tenían y ella sola se murió. No culpemos, pues, de la desaparición a la administración porque, aunque pueda tener su grado de responsabilidad, no es la única. Es una verdadera lástima privarnos en los ruedos de la presencia de este tipo de animales y que hayan de morir en el matadero en lugar de hacerlo en una plaza de toros.
Publicado el 9 de diciembre de 2010 a las 16:15.
