Rajoy: el paro que no cesa
Han saltado todas las alarmas. Los 6.202.700 parados que recoge la Encuesta de Población Activa -la ya popular EPA- del primer trimestre de 2013 ha sido como un tsunami es esta país llamado España. Rajoy y el PP se dedicaron a humillar a Zapatero y al PSOE y ahora son rehenes de sus palabras y promesas. La creación de empleo era el eje central del programa electoral “de sentido común” con el que el PP arrasó en las elecciones del 20-N de 2011. “El empleo es la mejor política social”, reiteraron desde todos los estamentos del Partido Popular, ya que con empleo hay ingresos en las familias y éstas generan consumo e impuestos para poder mantener el Estado del Bienestar. Esta política de acoso y derribo sirvió al PP para acorralar a Zapatero, al que no le quedó más remedio que, primero, anunciar su adiós y, después, adelantar las elecciones que deberían haber sido en marzo de 2012.
Como puede comprobarse fácilmente año y medio después, las prisas electorales del PP sólo tenían como objetivo llegar al poder y no solucionar los problemas de unos españoles cada vez más preocupados y empobrecidos. El PP y el Gobierno de Rajoy no sólo no han sido capaces de generar empleo, sino que ni siquiera han logrado detener la sangría del desempleo. A ZP se le ‘crucificó’ por no detectar la crisis a tiempo y al ver cómo la EPA caminaba con rapidez hacia los 5 millones de parados. Rajoy ha cogido carrerilla en ese peligroso camino que conduce al paro, a la frustración y a la falta de horizontes. Y es que Rajoy no sólo no ha sido capaz de generar empleo, o al menos de generar expectativas, sino que ha capitaneado la política de mayor destrucción de derechos de la reciente historia de democracia. Se han perdido derechos laborales, el despido es mucho más barato, se han hecho recortes en sanidad y educación, hay que pagar las recetas, ha subido impuestos como el IVA, el IRPF o el IBI, ha recortado los derechos de las prestaciones del paro y la ayuda familiar, jubilarse va a ser más difícil... Y lo más grave de tanto sacrificio es que no ha servido para nada porque la lista del desempleo crece a un ritmo vertiginoso. Es decir, cada vez estamos peor y sin síntomas de cambio.
Apenas año y medio en el poder y muchos ya ven tal desgaste en Rajoy que hablan de ‘cadáver político’. Rajoy, que perdió las elecciones de 2004 y 2008, prefirió la seguridad de la victoria forzando el ocaso de Zapatero que pactar con el PSOE un Plan de Estado para buscar soluciones consensuadas para salir de esta primera gran crisis financiera y mundial que, además, ha pillado a España en la Unión Europea en el grupo del Euro donde las decisiones las toma y las impone Alemania (Angela Merkel) y donde no hay margen para la maniobra nacional. Ahora el PP pide al PSOE ese pacto que se negó a Zapatero. Mal hará el PSOE en repetir la estrategia del PP. Urge un pacto para adaptar el Estado a las posibilidades de España y para generar confianza y empleo.
Publicado el 3 de mayo de 2013 a las 09:30.