Feve descarrila
Hace ya unos meses, concretamente con motivo del número 400 de Gente en León, escribía un largo artículo titulado ‘Lo que pudo haber sido y no fue’. Era una extensa crónica de la frustración que me producía comprobar como poco a poco se había ido desvaneciendo aquel León de ensueño que se había generado en el Consejo de Ministros celebrado en el Hostal de San Marcos en julio de 2004. Va para 10 años de aquello y sólo el Inteco parece tener las pilas cargadas.El Palacio de Congresos acumula retrasos y mutilación del proyecto (ya sin el gran techo solar diseñado por Perrault), el AVE sigue sin llegar y cuando lo haga en 2015 -es la última promesa- lo hará con sólo una vía, sin soterramiento y sin visos de seguir para Asturias; a la Ciuden le llueven los recortes de presupuestos y de futuro; de las autovías ni se habla; la minería condenada a muerte; la agricultura a rachas según las cosechas y los precios;... Y Feve. Otra vez Feve. El anterior alcalde, Francisco Fernández, se empeñó en hacer una tranvía sin Feve y descarriló. Luego tuvo que recurrir a Feve, pero ya era tarde porque la crisis se había hecho dueña de la situación y se preveía un batacazo socialista con un Zapatero sin rumbo. Y llegó el PP y se encontró con un proyecto de integración de Feve que suponía una inversión de 71 millones de euros y que incluía un ramal de tranvía al Hospital y en un futuro a la Universidad.Para ello se iban a utilizar los denominados ‘tren-tran’, trenes en recorrido y tranvías en la ciudad.Apenas queda nada de aquel proyecto original. Los recortes han ido minando aquello que se diseñó tanto que el portavoz socialista en el Ayuntamiento de León, José Antonio Diez, denuncia que la inversión quedará reducida a 9 millones de euros, que afirma se la podían haber ahorrado porque al final habrá vallas, barreras, pitidos, señales de tren y hasta una vía única para llegar a la estación de Matallana. Parece una broma, pero está camino de ser realidad si la ciudad no se pone manos a la obra para exigir un proyecto serio. Lo de hace diez años era un plan a largo plazo, casi una utopía; lo de ahora empieza a rayar la burla. Y León no se lo merece.
Publicado el 24 de enero de 2014 a las 09:30.