Serio aviso a Rafa Nadal en el Masters 1000 de Roma
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Iniciaba su andadura el número uno del mundo en el tercer Masters 1000 de la temporada sobre tierra batida con una vitola indiscutible de favorito. Enfrente, un tenista local, Paolo Lorenzi, que está anclado en el número 134 del mundo. Todo estaba preparado para que Nadal diera otro recital en el debut de un torneo que en las últimas temporadas le ha reportado muchas alegrías.
Pero ya sea por el daño que puede haber sufrido su confianza por las últimas derrotas ante Novak Djokovic, o por un simple bache de juego, lo cierto es que Nadal ha dejado muchas dudas en la tierra del Foro Itálico. El público apenas daba crédito cuando su jugador forzaba al número uno del mundo a llegar al tie-break en el primer set. No acabaron ahí las sorpresas. Esa muerte súbita caía del lado del tenista local, un resultado que hacía saltar las alarmas en Nadal. El traje manchado por una caída, la cabeza baja, el ánimo por los suelos...las perspectivas eran realmente malas.
El punto final del primer set define lo que estaba aconteciendo en la pista central romana. Lorenzi defendiéndose con mucha garra y Nadal fallando mucho más de la cuenta. Incluso una volea sencilla se marchaba al pasillo de dobles para cerrar la primera manga. Muchos esperábamos que ese fuera el punto de inflexión del partido, pero Lorenzi mantuvo viva la esperanza hasta que Nadal dejó tímidamente sus dudas a un lado para adjudicarse la segunda manga cuando el partido se encontraba en un peligroso 4-4.
El tercer set fue coser y cantar para Nadal, pero el aviso al número uno ya está lanzado. La tierra batida ya es monopolio exclusivo del jugador manacorí.
Publicado el 11 de mayo de 2011 a las 16:15.
