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Two Ex: "En la pandemia nos han pedido pinchar, pero que la gente no bailara"

Este dúo de música electrónica disfrutará este sábado 25 de una experiencia que el coronavirus le birló hace dos años: actuar en el Festival Paraíso de Madrid.

Archivado en: entrevistas, música, cultura, Two Ex, Festival Paraíso

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F. Q. Soriano
24/6/2022 - 00:03

Dos compañeras de piso que se conocieron saliendo de fiesta y que comparten “una frustración artística”. Así arranca la historia de Adriana y Rosa, las dos jóvenes que forman Two Ex, uno de los grupos que viene pegando fuerte en la escena madrileña de la música electrónica, tanto que su nombre está incluido en el cartel de Paraíso, el festival que se celebra este viernes y el sábado en el Campus de la Universidad Complutense.

El sábado 25 de junio vais a estar en Paraíso 2022. ¿Cómo afrontáis esta cita?
Adriana:
Con muchos nervios y muchas ganas. Es un evento que se programó para antes de la pandemia, se congeló, así que ahora es un disfrute triple.

Vuestras actuaciones se basan en B2B orgánico. Cuando hay en el horizonte algo tan importante como Paraíso 2022, ¿os basáis en algún tipo de estructura o dejáis que la improvisación sea la que marque el camino?
Rosa:
Sobre todo es la improvisación, es lo que hacemos siempre. Nos guiamos por la vibra de la gente a la hora de poner un tema u otro.

Adriana: Sería estropear la oportunidad que nos brinda estar ahí, cómo leemos a la gente, cómo nos lo pasamos nosotras y cómo lo transmitimos.

Aunque sobre el escenario se disfruta de la electrónica de Two Ex, ¿qué aporta Adriana y qué aporta Rosa a esta fórmula?
Adriana:
No tenemos una aportación específica. Hacemos un B2B en base a lo que nos fluye en cada momento. Cada una bebemos de lo que hemos escuchado a lo largo de nuestra vida, de diferentes géneros, yo a lo mejor he tirado más por el rock.

Rosa: Desde pequeña me encantaba la electrónica, la más 'bakalaera'. También me gustan otros estilos. Partiendo de la electrónica, lo que ponemos emana de muchos estilos. Aprendimos juntas y estamos juntas, hacemos un equipo genial.

"Fue difícil asimilar la cancelación de este festival hace dos años" 

Estáis acostumbradas a actuar en Madrid, pero, ¿supone un plus de nerviosismo el hacerlo en un festival de este calado?
Adriana:
Sí, es diferente. En un festival vas a propósito, en una sala a lo mejor no es así.

Rosa: También el sonido al aire libre se escucha y se siente de otra manera. Según el lugar en el que estemos somos más frescas o más oscuras, por ejemplo, en Paraíso, por el horario, vamos a poder mostrar esas dos vertientes de día y de noche.

¿Qué tiene de diferente un show en salas como El Sol o Café Berlín y otro en el Campus de la Complutense?
Adriana:
En las salas más pequeñas es más directo, estás viendo más de cerca las reacciones del público. Como nosotras disfrutamos del enclave y tratamos de pasarlo bien, creo que en este festival tendremos que romper la barrera de los nervios en un comienzo para después leer a la gente y disfrutar.

Rosa: Es de las primeras veces que estamos en un festival. Antes de 2020 sí que habíamos ido a alguno, pero este es el más importante, es algo casi nuevo. Vamos a aprender mucho de esta experiencia.

Durante la etapa más dura de la pandemia participasteis en iniciativas como United We Stream. ¿Cómo habéis llevado este tiempo de incertidumbre, ha sido más difícil para el mundo de la electrónica, tan ligado a las sesiones en vivo?
Adriana:
Asumiendo el cambio de formato, que era lo que más nos mataba, hacer los 'streamings'.

Rosa: Aprendimos de todo, hasta tuvimos que cambiar los cables de conexión a Internet para hacerlo en condiciones. Nuestra actuación en United We Stream fue un lunes por la tarde, las dos trabajábamos, no había público, solo 20 cámaras... Era mucha presión, sin la gente una sala vibra el triple. Era como un recital, demasiado serio.

¿Ha sido más difícil para el mundo de la electrónica, tan ligado a las sesiones en vivo, mantener las actuaciones en la pandemia?
Adriana: Sí. Cuando se acabó el confinamiento, las sesiones que hacíamos era para gente sentada, con mascarilla y casi maniatados. Nos tuvimos que adaptar muchísimo.

Rosa: Damos las gracias a las salas que en esos momentos siguieron apostando por nosotras. También esa experiencia nos permitió conocer otros estilos, vivir sesiones más tranquilas porque al DJ lo que nos pedían entonces era que la gente no bailara, la antítesis total de nuestra labor.

Viajemos un poco más en el tiempo. ¿Cuándo surge Two Ex?
Adriana:
Surge al poco de compartir piso. Teníamos una frustración artística y nos gustaba la música electrónica, nos habíamos conocido de fiesta.

Rosa: Decidimos comprarnos un equipo muy antiguo lo que nos permitió enfrentarnos de forma temprana a las salas, porque los equipos más nuevos son más sencillos. Nos lo tomamos como un hobby serio, no se puede vivir de la música como nos gustaría.

"Esto es una carrera de fondo, queremos estar muchos años" 

¿En qué momento de vuestras vidas decidisteis que os queríais dedicar a la electrónica?
Rosa:
Yo soy directora de arte, había diseñado un cartel para una fiesta y nos invitaron. Empezamos sin expectativas, no teníamos una intención de dedicarnos a esto. La decisión del nombre se tomó en una conversación de sofá, pero desde el cachondeo más profundo.

Adriana: Nos lo tomamos en serio, le dedicamos tiempo, nos importa y queremos que las cosas salgan bien, pero siempre con un tono desenfadado. Nos gusta atraer a la gente que no conozca la electrónica y que incluso tenga ciertos prejuicios. Hemos invitado a gente que escucha indie u otros estilos y se lo han pasado bien en nuestras sesiones.

¿Cómo de difícil es abrirse paso en la música electrónica, se puede vivir de ello?
Adriana:
Nos hemos apoyado en un colectivo en el que estamos desde hace mucho tiempo. El proceso fue ir buscando salas para pinchar y a raíz de que te vean en diferentes sitios te van llamando más.

Rosa: En nuestro caso, hace tres o cuatro años, nos seleccionaron de un programa del British Council, 'We are equals', cuyo objetivo es fomentar la presencia de la mujer en la música electrónica, algo que, gracias a Dios o a quien sea, en estos años ha cambiado bastante. Llevamos seis años pinchando y hemos notado un cambio brutal, antes no teníamos referentes. Gracias a ese programa pudimos conocer a muchas otras chicas y pinchar en el escenario del Orgullo ante 20.000 personas, fue tremendo. De ahí salieron muchos contactos y colaboraciones.

"Una mujer es más criticada y sexualizada cuando se sube al escenario" 

Para aquellos que no conocemos tanto este mundillo, ¿es numerosa la presencia de artistas femeninas?
Adriana:
Todavía está descompensado, hay carteles de festivales que son masculinos casi en su totalidad. Necesitamos un impulso para poder estar en igualdad y competir desde el mismo punto.

Rosa: Noto que cuando te subes a un escenario, por el hecho de ser mujer, parece que hay que demostrar un poco más, eres más criticada y sexualizada. Nosotras somos dos chicas y nos preguntan cosas que no le preguntarían a dos chicos. También notamos que al ser un poco más conocidas estamos más expuestas, hay algo más de crítica. Para nosotras es una carrera de fondo, está genial estar en Paraíso, pero queremos seguir muchos años en la escena.

Adriana: Estar más expuestas demuestra que todavía no estamos en el punto de la igualdad.

¿Cómo lleváis esta parte de las críticas?
Adriana: Lo llevamos bien. Las críticas constructivas se aceptan, todo lo que no tenga que ver con la cabina nos da igual. Debemos sentirnos seguras de nosotras mismas y así disfrutaremos más.

Para terminar, un sueño artístico que os gustaría vivir.
Adriana:
Esto en realidad esto ya es un sueño, pero queremos hacerlo durante mucho más tiempo.

Rosa: Sobre todo lo que pedimos es que no haya más pandemias. Cuando nos dijeron que íbamos a estar en Paraíso, cuatro meses antes, ya estábamos nerviosas, así que fue difícil gestionar recibir esa llamada el día antes del confinamiento en la que nos confirmaban la cancelación. Me encantaría pinchar en el Basoa, del BBK Live, que es mi escenario favorito.

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