martes, 21 de mayo de 2024 19:28 www.gentedigital.es facebook twitter

Gente digital

Logotipo diario gente
Kiosko. Portadas de periódicos
entrevista

Joaquín Cortés: "Soy un rebelde con causa: la lucha por la danza, la música y la cultura"

El artista cordobés regresa a Madrid para presentar en el Teatro Real su nuevo espectáculo, ‘Esencia'. En esta entrevista también repasa su extensa trayectoria.

Archivado en: entrevistas, cultura, Joaquín Cortés

aumentar texto reducir texto imprimir enviar noticia comentar
Joaquín Cortés

Joaquín Cortés

"Cuando reviso mis actuaciones, siempre me veo mal, soy muy crítico conmigo"

añadir a meneame  añadir a freski  añadir a delicious  añadir a digg  añadir a technorati  añadir a yahoo  compartir en facebook  twittear 

Francisco Quirós Soriano
10/3/2023 - 00:23

Bailaor, coreógrafo y productor. A medida de que su carrera iba avanzando y llenándose de éxitos, Joaquín Cortés ha ido ampliando horizontes hasta convertirse en un artista completo. Su último espectáculo, ‘Esencia', le trae de vuelta a Madrid para actuar en un escenario de relumbrón, el del Teatro Real, el próximo martes 14 de marzo, antes de presentarlo en Sevilla, Barcelona o San Sebastián.

Ya inmerso en una nueva gira, ¿qué va a ver el público en este espectáculo, 'Esencia'?
El público se va a encontrar toda una vida, toda una carrera de más de 40 años, de un artista que ha creado muchas obras y ha desarrollado un estilo único y personal basado en la fusión de danzas y de músicas. Esa es la esencia de Joaquín Cortés, lo que soy como coreógrafo, creativo, director y bailarín.

Por englobar todas esas facetas, ¿lo convierte en una gira más especial?

Sí, sobre todo tengo mucha ilusión en esta gira, porque es la vuelta tras todos estos años en los que hemos sufrido la pandemia y en los que el sector de la cultura es de los que más ha sufrido. Volver a subirte a un escenario, me genera una ilusión brutal, tengo muchas ganas de estar sobre el escenario.

En 1992 creó su primera obra, 'Cibayí', que llevó a varios países. ¿Qué recuerda de aquella etapa?

¡Buah! Esa etapa fue increíble, no paraba. Claro, estaba empezando, ya no solo como bailarín, sino también como coreógrafo y director. Fue una etapa muy bonita, muy dura, con muchas horas, trabajo y sacrificio, pero luego también fue muy enriquecedora porque tenía el público a mis pies, estaba conmigo de manera incondicional.

¿En qué se inspira a la hora de crear espectáculos como aquel 'Cibayí' o el actual 'Esencia'?
Me inspiro en la propia vida, en mis viajes, moverme por el planeta me ha hecho tener otra mundología, he ido absorbiendo de todos lados, de las diferentes culturas, aunque hoy el mundo está globalizado y ha perdido identidad. Todo eso que he ido viendo y viviendo me ha alimentado y me ha servido para crear.

¿Cómo de difícil es irse reinventando, hacer algo que sea novedoso para el público?
Es complicado, temes que la gente vaya a verte y sienta que estás haciendo lo mismo de antes. Es difícil no caer en la repetición, pero tratamos de hacer cosas nuevas para seguir creciendo como artista y como creativo.

De todas esas vivencias internacionales, ¿cuál es la que le ha marcado más?

Una de las que más me marcó fue al comienzo de mi carrera, en París. Allí debuté con 'Cibayí', mi primera obra con la compañía 'Joaquín Cortés Ballet'. Era el año 1992, en el Teatro Champs Elysées, y fue uno de los momentos más importantes de mi carrera y de mi vida, sirvió para que me consolidara, no tanto como un bailarín reconocido, que ya lo era, sino como un coreógrafo y directo con una compañía grande.

Con la perspectiva que da el tiempo, ¿cuál ha sido la mayor dificultad con la que se ha encontrado en su carrera?

La mayor dificultad quizás sean cosas como una lesión que te impide estar sobre el escenario durante un tiempo y conlleva cuidarte, hacer una recuperación. En general, me siento un hombre muy afortunado, he tenido una carrera muy larga y he tenido mucha suerte con ese tema de las lesiones, apenas me he lesionado.

Durante este tiempo ha acumulado críticas, unas positivas y otras no tanto, como cualquier artista. ¿La experiencia le ha servido para prestar menos atención a esos comentarios?
Cuando las críticas son constructivas hacia una obra que has creado, bien; cuando las críticas son hacia ti como persona, esas las encajo peor. Se tiene que hacer crítica sobre una obra, sobre un espectáculo, no al personaje que lo monta, que es una 'celebrity'. Claro que se puede decir si te gusta o no una obra, pero siempre con una crítica constructiva, eso me ayuda como creativo a valorar el comentario. Eso es lo que le pido a los críticos, una crítica constructiva es buena porque la miras con positividad, te hace valorar en qué aspectos tiene razón y qué se puede cambiar, como creativo te ayuda a retocar cosas y mejorar la coreografía o la historia que quieres contar. Cuando se meten contigo como personaje se desvía lo importante.

Hemos hablado de esa crítica externa, pero para llevar a cabo estos espectáculos donde se mima cada detalle, ¿cómo convive con la autocrítica?
Soy muy crítico conmigo mismo, incluso no me gusta verme, cuando lo hago, siempre me veo mal. Por deformación profesional, con el paso de los años te vuelves más exigente y lo quieres todo muy pulcro, muy limpio. Ya digo que cuando veo actuaciones mías, aunque el resto del equipo me diga que le ha encantado al público, no acabo de estar contento.

¿Cómo son esos minutos previos a salir al escenario, tiene algún ritual?
De joven, sí, tenía la manía de persignarme y besar el suelo antes de salir, lo hice desde la adolescencia hasta hace poco. ¿Manías? No, antes en el escenario sí que me daba un poco de Parkinson en las rodillas, lo que demuestra que el artista está vivo, son los nervios porque se va a abrir un telón y no sabes qué te vas a encontrar, si le va a gustar al público lo que le vas a enseñar.

Cuando un actor o un cantante sale al escenario puede, en mayor o menor medida, contemplar las caras y, por tanto, las reacciones del público. En su caso, en el frenesí de sus coreografías, ¿puede establecer esa conexión?
Yo sí, además, me gusta mucho interactuar con el público, al final creo que en esa hora y media de espectáculo tiene que haber esa conexión, siempre digo que esto no es un monólogo, es un diálogo entre público y artista, y debe ser así para que la gente viva lo mismo que tú, ese viaje que estás haciendo.

Cuando Joaquín Cortés decida poner punto y final a su carrera artística, ¿cómo le gustaría ser recordado?

Lo importante aquí es que yo he intentado, desde que empecé mi carrera, por amor y pasión a la danza y a la música, es llevar nuestra cultura al mundo entero y que lo vean y lo disfruten, esa ha sido mi lucha. He viajado mucho, he hecho mucho. Quiero que me recuerden como un luchador, un rebelde con causa, la mía es luchar por la danza, por la música y por la cultura.

Gente Digital en Facebook

Grupo de información GENTE · el líder nacional en prensa semanal gratuita según PGD-OJD
Desarrollado por Tres Tristes Tigres