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José María Movilla, un mito al servicio del Rayo Majadahonda

El exfutbolista leganense sigue ligado al mundo del fútbol, ahora como director deportivo. Se siente "un privilegiado" por poder sumar su experiencia a un club al que califica de "familar, pero grande".

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Movilla, en la Ciudad Deportiva de La Oliva· CHEMA MARTÍNEZ

"El club está saneado; lleva muchos años haciéndolo muy bien"

Francisco Quirós
03/4/2017 - 10:28

Cuando era jugador del Atlético de Madrid, su presidente, Jesús Gil, llegó a decir de él que no lo cambiaría por Zidane, en alusión al fichaje 'galáctico' del francés por el Real Madrid. Curiosamente, los caminos profesionales de la estrella gala y de José María Movilla vuelven a estar en la Comunidad de Madrid, después de que el exjugador de Leganés se convirtiera en director deportivo del Rayo Majadahonda, una llegada que el propio Movilla pone en contexto para GENTE: "Tras la baja del anterior director deportivo, el club pensó en mí y puedo decir que soy un privilegiado, porque el organigrama y la estructura de la entidad están muy bien, a pesar de ser un modesto. Dentro de lo que hay y del buen hacer de todos sus integrantes, me he encontrado con que todo son ganas de aportar y de hacerme sentir bien, algo que siempre es positivo y de agradecer".

El nuevo rol de Movilla, ahora lejos del césped, pasa por "controlar la metodología desde la base, ayudar a lograr los objetivos del primer equipo, estar en esa unión entre directiva y plantilla y lógicamente hacer los fichajes para el próximo año, en función de en qué categoría esté el club".

Precisamente, preguntado por esta última función, el que fuera jugador del Zaragoza y Rayo Vallecano, entre otros, pone en valor que, a la hora de mirar al mercado, "estar en Madrid es una ventaja, ya que para los jugadores siempre es un aliciente, ya que les sirve para proyectarse; hay interés en venir aquí y triunfar en los próximos años". A esto, hay que sumarle otro valor positivo, la buena reputación del Rayo Majadahonda. "En este sentido, el club lleva muchos años en esa dinámica, saneado desde el punto de vista económico e institucional, teniendo claro dónde está, sobre todo la cabeza visible, que es su presidente Enrique Vedia, quien lleva remando muchos años por un proyecto atractivo. Es un club familiar, y eso le hace ser grande. Hay equipos en Segunda B que se van al traste porque han gastado más de lo que podían y en cambio hay otros que funcionan, aunque económicamente no sean tan fuertes", expone.

MIRANDO AL FUTURO
Dentro de toda la materia prima con la que cuenta el Rayo Majadahonda, Movilla valora especialmente los más de 700 niños que están en las categorías inferiores, aunque considera que es complicado dar el salto desde el juvenil para competir en el primer equipo dentro de la Segunda B. Ese cambio cualitativo también afecta a otros clubes de la Comunidad, como el Alcorcón o el Getafe, "lo que abre la puerta posibles cesiones a clubes como el Rayo Majadahonda".

Con estos mimbres, una gran dosis de experiencia y la ilusión por bandera, Movilla desprende optimismo, aunque sin perder de vista que "en algo me equivocaré; no somos máquinas y no siempre acertaré en mis decisiones", un razonamiento elogiable pero que, volviendo al recuerdo del Movilla jugador, no evitará que se deje la piel en este nuevo reto.

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