“La buena cosecha es una alegría en medio de esta situación”
Los agricultores de la Comunidad de Madrid han comenzado la siega de los cereales. Las previsiones apuntan a un aumento de entre el 30 y el 50% con respecto a 2019, según las zonas.
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La siega en Daganzo ·ALBERTO GODÍN
Los bajos precios podrían arruinar la satisfacción por la cosecha
Mamen Crespo
25/6/2020 - 13:14
La Comunidad de Madrid también tiene campo, aunque no sea tan reconocida por su medio rural como lo son otras regiones de nuestro país. En los últimos días, sus productores han iniciado también la siega del cereal, con unas previsiones muy optimistas. De hecho, los agricultores madrileños esperan recoger entre un 30% y un 50% más que el año pasado, según las zonas, de trigo, cebada, centeno, avena y triticale, los principales cereales que se siembran en la comunidad.
En concreto, Cooperativas Agro-alimentarias de España apunta a una cosecha en Madrid de 326.693 toneladas, "una producción que es una alegría en medio de esta situación tan dura que estamos viviendo", según apunta José Francisco Brunete, agricultor de Quijorna.
De ese total, 72.295 toneladas corresponden a trigo blando; 204.192 a cebada; 30.416 a avena; 3.540 a centeno; y 16.250 a triticale y otros cereales, según las previsiones de las cooperativas publicadas a principios del mes de junio. Estas cifras son una "alegría" si se comparan con las de 2019, "un año desastroso", según Brunete, que ha querido dejar claro, en declaraciones a GENTE, que "va a ser una buena cosecha, aunque no excepcional". En la zona Oeste, donde se encuentra Quijorna, han segado ya la avena con una producción de 2.500 kilos por hectárea de media. "Es muy buen rendimiento para esta zona, al igual que los 3.000 kilos/ha en las cebadas", subraya este agricultor.
NORTE Y ARGANDA
En la zona Norte, las sensaciones, tan solo unos días después de comenzar a cosechar, son igual de optimistas. Según Marco Navacerrada, agricultor de San Sebastián de los Reyes, que también tiene cereal en Daganzo, los rendimientos son "muy buenos" y "el peso específico elevado", tanto en cebada como en avena. El problema lo encuentra en los precios "que cada vez son más bajos", según apunta. En este punto coincide con Cipriano Guillén, agricultor de Arganda del Rey, que asegura que les "están pagando la cebada a 26 pesetas, lo mismo que cobraba mi padre por ella en 1986". La parte positiva en los precios es que "la alta demanda de harina por parte del consumidor ha hecho que el precio del trigo sea mejor", según los datos que maneja Guillén.
En la zona Este, al igual que en el resto, "las lluvias de invierno y primavera van a hacer que este año merezca la pena", según Guillén, que apunta a un aumento de producción del 30% en Arganda del Rey y alrededores con respecto al año pasado.
A pesar de los precios, en la Comunidad de Madrid se puede hablar de una buena cosecha, algo que para Alberto Godín, agricultor de Daganzo, "firmaba para cada año". Eso sí, "con buenos precios", deja claro.
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